La embestida opositora en el Congreso para mejorar las jubilaciones se quedó otra vez a mitad de camino. Por falta de quórum, la oposición fracasó ayer en su intento de sesionar en la Cámara de Diputados para tratar el incremento de los haberes y del bono de emergencia para jubilados. El temario de la sesión también se proponía destrabar el nombramiento de la presidencia de la comisión investigadora $Libra y la designación de representantes para la Auditoría General de la Nación (AGN).
La convocatoria impulsada por Unión por la Patria, Encuentro Federal y Democracia para Siempre apenas pudo sentar en las bancas a 124 de los 129 necesarios para habilitar la sesión, por lo cual a las 12.31 el presidente de la Cámara, Martín Menem, decretó el fracasó de la sesión.
Los diputados de UP, EF y Democracia para Siempre habían pedido la sesión especial tratar la extensión de la moratoria y la creación de un nuevo sistema de Prestación Proporcional, el aumento del 7,2 por ciento a las jubilaciones, un incremento del bono que perciben los que cobran la mínima, pero la ampliación para designar a dos auditores generó tensión en la oposición.
UP proponía a Juan Ignacio Forlon, un dirigente de la agrupación “La Cámpora”, mientras que EF a Emilio Monzó, que no tenía el respaldo de la UCR y la Coalición Cívica, que insiste con la postulación de Mario Negri.
Los bloques opositores querían incluir la definición de las autoridades de la comisión investigadora de la criptomoneda, pero el oficialismo no había aceptado incluir el tema en la ampliación solicitada por los opositores.
En la reunión de Labor Parlamentaria realizada previo a la sesión, el presidente del bloque de UP, German Martínez, pidió la prórroga por una hora de inició de la deliberación del pleno del cuerpo, pero fue rechazado.
Para el fracaso opositor, fueron claves las ausencias de tres de los cinco diputados cordobeses de Encuentro Federal: el gobernador Martín Llaryora le dio la orden a Alejandra Torres, Carlos Gutiérrez e Ignacio García Aresca de dejar las bancas vacías.
Minutos antes de la sesión, a través de la red social X, Torres se quejó de que se haya decidido “mezclar un tema tan complejo y urgente como el de las moratorias con otros como la distribución de cargos en la AGN o el tratamiento de $LIBRA no es la mejor manera de resolver los problemas de los jubilados”.
En el bloque que preside Miguel Pichetto tampoco estuvo el chubutense “Loma” Ávila, quien responde al gobernador Ignacio Torres. Nicolás Massot (EF) y Álvaro González (PRO) estaban presentes pero no anotaron para el quórum porque se distrajeron charlando parados, sabiendo que de todos modos el número no estaba. Además faltaron a la cita los diputados de Democracia para Siempre Jorge Rizzotti y Juan Carlos Polini, quien llegó sospechosamente más tarde (reporta al gobernador de Chaco, Leandro Zdero).
De Unión por la Patria se ausentaron, entre otros, cuatro santiagueños (Celia Campitelli, Ricardo Daives, José Gómez y Bernardo Herrera) y dos catamarqueños (Fernando Ávila y Dante López Rodríguez), obedeciendo a las instrucciones de sus respectivos gobernadores, Gerardo Zamora y Raúl Jalil.
> Degradación y despidos en DD.HH
El Gobierno Nacional anunció que la Secretaría de Derechos Humanos reducirá la jerarquía a una subsecretaría y reveló que aplicarán un recorte del 40% de la estructura y del 30% del personal. El vocero presidencial, Manuel Adorni, flamante legislador porteño, fue el encargado de detallar la medida en la habitual conferencia de prensa semanal.
“El Ministerio de Justicia definió que la Secretaría de Derechos Humanos será convertido en Subsecretaría de Derechos Humanos. De esta manera, se va a recortar el 40% de la estructura y el 30% del personal, lo que implica un ahorro de 9.000 millones de pesos anuales”, sostuvo.

