Jaqueado por la falta de dólares y pese al amague que ilusionó a los agroproductores sobre no cambiar las actuales reglas de juego, el Gobierno nacional le puso fin a la baja de las retenciones para la soja, maíz, girasol y sorgo. En cambio, prorrogó la rebaja temporal de retenciones para la cebada y el trigo.
Así lo estableció mediante el decreto 439/2025 publicado este viernes en el Boletín Oficial.
Los cambios regirán desde el próximo 1° de julio, dado que hasta el lunes 30 de junio rigen las rebajas que habían sido anunciadas a principios de año. De esta forma, las retenciones para trigo y cebada mantienen la alícuota de 9,5% hasta el 31 de marzo. Pero, la alícuota de la soja vuelve al 33%, la del maíz y el sorgo al 12%, y la de girasol a 7%.
El miércoles, el vocero, Manuel Adorni, había ilusionado al campo cuando dijo que “no había una decisión tomada respecto al fin de la rebaja”, pero dos días después se concretó.
Ante este escenario, durante la semana hubo una fuerte anotación de Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE), para realizar las últimas operaciones con las alícuotas reducidas.
En tanto, para gozar del beneficio de la rebaja de alícuota, el 95% de las divisas deben ser ingresadas en los próximos 15 días, lo cual le dará alivio a las reservas del Banco Central.
Desde que se implementó la rebaja temporal de las retenciones, el 27 de enero, se anotaron en total 15,8 millones de toneladas de subproductos de soja; 17,9 millones de toneladas de maíz; 6,5 millones de toneladas de poroto de soja y 3,8 millones de toneladas de aceite de soja.
De esta forma, en los últimos 15 días ingresaron unos US$ 5.000 millones aproximadamente.
Las entidades del campo cuestionaron la decisión, mientras las empresas agroexportadoras rescataron la decisión de prorrogar el beneficio para algunos productos.
Desde CIARA-CEC “celebraron” la decisión porque consideraron que “van en el camino correcto”.

