¿Cómo se define el Estado de Derecho en una república? En una nación como la nuestra ¿dónde empieza y donde termina?. Primigeniamente, El Estado de Derecho es el marco institucional, jurídico y constitucional de todos los derechos tutelares del ser humano que dignifica su condición de ciudadano y lo ubica dentro de una sociedad para que participe, trabaje, se socialice frente a sus conciudadanos en un plano de igualdad y equidad.
El Estado de Derecho es simple, lisa y llanamente protección presente y futura de generaciones de argentinos frente al avallasamiento de sus naturales derechos por acción u omisión de quien ostente algún grado de poder o autoridad sobre sus vidas.
Esto encuadra en una dolorosa realidad que muchos jóvenes sanjuaninos sufren, y se llenan de ese amargo sentimiento que se llama impotencia tan solo por tener la aspiración de educarse, y que medidas u inobservancias de las autoridades educativas de turno, dificultan o impiden de alguna manera que puedan estudiar.
¿Estudiar es un derecho? Si así lo fuere, entonces existe una flagrante violación a este precepto constitucional, aquí en San Juan, a jóvenes que sólo quieren hacerlo; pero los funcionarios toman decisiones y determinaciones que favorecen y a la vez perjudican a un importante sector del tejido social, del que son directamente responsables.
Precede una palmaria realidad en esta tierra sarmientina donde hay cientos de jóvenes estudiantes de Institutos terciarios privados, registrados y autorizados por el Ministerio de Educación a través de la Dirección de Enseñanza Privada, que no son reconocidos como tales para tener el beneficio del Boleto Escolar o Estudiantil por lo cual para concurrir diariamente a cumplir con sus obligaciones deben asumir mayores costos de transporte con el consiguiente agravamiento en la economía familiar, por el solo hecho de no ser alumnos de gestión pública estatal, lo que los inhibe al beneficio del traslado.
¿Qué razones o argumentos, para las autoridades educativas, exhiben para diferenciar a los alumnos de gestión estatal de la privada, sea laica o religiosa? ¿Por qué estos si gozan del beneficio del Boleto Escolar y los otros no? ¿Desde la Dirección de Enseñanza Privada se direcciona quienes deben gozar de este beneficio y quienes no? Las empresas de transporte público de pasajeros solamente cumplen el acuerdo pactado, ya que la norma ministerial así lo dispone.
Entonces, ¿cómo podemos interpretar que un gobierno municipal, desde hace varios años, viene brindando a los jóvenes de su departamento becas para el transporte escolar a alumnos que asisten a escuelas secundarias y a estudiantes universitarios que deben trasladarse hasta la ciudad para asistir a clases y la cartera educativa no contemple, en su gestión ministerial, el transporte escolar en su concepción integral a todas las situaciones en las que deben atravesar jóvenes de distintos puntos de la provincia?
¿La legislatura sanjuanina con sus representantes de la ciudadanía desconoce esta lamentable situación? ¿Se necesita una ley o una simple Declaración Parlamentaria para poner un poco de justicia e igualdad en el universo estudiantil provincial?
Si tanto en la vida, como en quienes tenemos la vocación de educar; enseñamos una premisa que debemos trasmitir e ilustrar es: "Toda idea tiene su valoración de equidad y su valoración de inequidad”. Siendo éste un precepto moral de los conocimientos curriculares de la Educación, como baluarte; entonces como podemos explicar este clamor: ¡que impotencia, que dolor!
Este lamento lo encontramos en cada lugar donde existe un centro educativo de este nivel. Simplemente porque van a estudiar carreras que su vocación natural les señala como realización para su futura inserción profesional, en esa sociedad que les reclama como aporte para hacerla más justa entre quienes la integran pero que no han sido contemplados por el Estado y son cubiertos por el interés privado.
Cualquiera lo puede corroborar, porque es la dura realidad que avergonzaría al propio Domingo Faustino Sarmiento, viendo esta discriminación en su tierra, en su patria chica, por la cual el dio todo.
Ante el riesgo de expresarme con un manto de error, sería muy bueno que alguna autoridad me rectifique, diríamos que ¿La Educación Pública Privada es una Educación Tercerizada?; o si esto no es discriminación, ¿habrá alguien que me explique por qué insisten en que estudiar se transforme en una inmensa epopeya personal?
(*) Educador.