¿Sabe usted cuál es una de las principales causas de mortalidad en nuestro país? ¿Sabe usted qué a consecuencia de esta causa diez mil personas pierden la vida en la República Argentina, que más de 40.000 quedan con lesiones graves de por vida y que aproximadamente 100.000 sufren lesiones leves. Esta causa no es otra que la accidentología vial.

Pero lo más grave de este flagelo considerado como endemia por la Organización Mundial de la Salud (OMS), es que más del 95% de los accidentes de tránsitos en nuestra Nación son producto de la conducta humana, mejor dicho consecuencia de la imprudencia humana. Esta triste realidad no es otra cosa que una mala conducta en la convivencia vial de los ciudadanos que circulamos por las calles, sea como conductor de algún vehículo, sea como pasajero o simplemente como peatón.

Y en nuestra Provincia, ¿qué nos dicen las estadísticas?

Lamentablemente en San Juan, los números estadísticos no son mejores que en cualquiera otra provincia del país. Cuando aún promediamos el quinto mes del año se publica que en San Juan 70 personas perdieron la vida en accidentes de tránsito. El año próximo pasado se produjeron más de 5.000 accidentes viales con un promedio de 150 fallecidos de los cuales el 50% de ellos eran conductores o se conducían en motocicletas.

Pero que podemos hacer para evitar tantas muertes, para evitar tantas lesiones. La respuesta a este interrogante es muy simple. Tenemos que "’educar”, esta es la única solución. Y esta educación tiene que empezar ya. No podemos perder un solo día más, ya que si seguimos en esta espera más vidas humanas serán víctimas fatales de esta endemia. También en estos días es noticia en nuestro querido San Juan, la renuncia del Director de Tránsito y Transporte, como así también que nuestra legislatura sancionó una ley, que obliga a los conductores de motos y bicicletas hacerlo con chalecos o bandas refractarias.

Esperemos que la nueva autoridad en esta dependencia del Estado pueda ser capaz de llevar adelante una política educativa en materia vial y así comenzar a trabajar en consecuencia. También bienvenida sea esta Ley que determina la obligatoriedad del uso de elementos refractarios, para motoristas y ciclistas. Pero yo me pregunto no sería más fácil que nuestros legisladores y también los funcionarios del Poder Ejecutivo le dieran cumplimiento al artículo 9º de la Ley Nacional de Transito, a la cual nuestra provincia adhirió con la sanción de la Ley provincial Nro. 6.684 del año 1996.

No sería mejor empezar a implementar la educación vial en nuestras escuelas en coordinación entre el Ministerio de Educación y la Dirección de Tránsito, como lo determina la legislación nacional menciona, comenzando con los más pequeños, en nuestras salitas de jardines de infantes, para continuar en todos los niveles hasta incluso en las universidades. Porque solamente educando seremos capaces de frenar tantas muertes absurdas.

Seguramente muchos podrán plantear otras soluciones a esta problemática, como endurecer los controles con castigos y penas más duras para los infractores de tránsito. Lo cual ya se implementó en muchas ciudades del mundo y los resultados fueron que no lograron bajar los índices accidentológicos en esos lugares. También hay quienes piensan que con la creación de organismos no gubernamentales se puede bajar los miles y miles de accidentes viales que ocurren en la Argentina, todos fracasaron y algunos que existen en nuestro país no hacen otra cosa más que difundir estadísticas ya conocidas y mostrar los accidentes que a diario los ciudadanos los vemos en las calles y rutas de nuestras ciudades.

Bien lo dijo el gran educador Domingo Faustino Sarmiento "’Un pueblo educado es un pueblo sano”. ¿Nosotros seremos capaces de sanar a nuestro pueblo y capaces de educar y dejar de llorar por la muerte de nuestros padres, hijos, hermanos o de cualquier familiar cuando sin sentido dejan su vida a causa de este gravísimo flagelo? ¿Seremos capaces los sanjuaninos de hacer honor la palabras de Sarmiento y seguir su legado de educar al soberano?

¿Seremos capaces de ser ejemplo y demostrarle a la Nación toda, que desde esta pequeña provincia las cosas se hacen bien ante esta problemática que tanto dolor nos causa, con el solo hecha de educar?

¿Seremos capaces?

(*) Profesora de Nivel Inicial.