Natán, uno de los cuatro hijos de Herman Goransky, concretó su proyecto de viajar a los Estados Unidos, buscar, investigar y reivindicar la monumental obra cinematográfica de su padre en aquel país, en los años ’70 y ’80.

Los Ángeles acaba de ser el escenario de un acontecimiento que marcará desde ahora la historia de la cinematografía argentina e internacional. El protagonista principal es Herman Goransky, fallecido en 2010, nieto del inolvidable empresario don Abraham Goransky, e hijo de Saúl Goransky también de destacada actividad en San Juan. En este 2023, Natán, uno de los cuatro hijos de Herman, concretó su proyecto de viajar a los Estados Unidos, buscar, investigar y reivindicar la monumental obra cinematográfica de su padre en aquel país, en los años ’70 y ’80.

Herman Goransky, nacido en San Juan, destacó por su brillantez académica desde muy joven y gracias a su capacidad y sabiduría con los números, su padre lo encaminó a estudiar contador público siguiendo los mandatos de esta laboriosa familia.

Según comenta su hijo Natán "a pesar de que sus sueños eran ser cineasta y vivir en los Estados Unidos, Herman decidió complacer a su padre por el gran cariño y respeto que ambos se profesaban, y estudió Contaduría Pública y Economía en la Universidad de Mendoza". Allí no sólo se distinguió por obtener el mejor promedio universitario, sino también "por su innovador trabajo sobre la inflación, ganando reconocimientos y premios con tan sólo 22 años", memora Natán de lo contado rigurosamente por su madre Liliana Ramos y otros familiares.

Herman Goransky

El sueño del cine

Una vez obtenido el título y entregado en manos a su padre, cumplía tan formal promesa y al mismo tiempo sus deberes familiares, por lo que decidió viajar a Estados Unidos y concretar quizá su mayor sueño: estudiar cine.

Lo lograba contra toda opinión familiar y por tanto sin apoyo para hacerlo, ya que los suyos esperaban el regreso de Herman a las empresas familiares. Pero él se trasladaría sin escalas a Hollywood para matricularse en la Universidad del Sur de California (USC), fundada en el siglo XIX, una de las casas de altos estudios más prestigiosas del mundo. 

Allí, mientras estudiaba cine trabajó en diversos empleos para poder sustentar los elevados costos en aquel país. Paralelamente disfrutaba interactuando con futuras leyendas como George Lucas, cineasta, propietario de Lucasfilm, y Steven Spielberg, célebre director, guionista y productor, quienes estudiaban con el sanjuanino en la misma universidad. Con contactos como estos forjó muy significativas amistades y colaboraciones con grandes figuras del cine. Pero Herman Goransky hace varios años que ya no está en este mundo y uno de sus hijos antes mencionado, Natán, el más cinéfilo de todos, decidió ir en busca de toda esa historia de su padre en el corazón del cine mundial, Hollywood.

"Mientras estudiaba cine en Hollywood, Herman Goransky interactuaba con futuras leyendas del cine, como Steven Spielberg, célebre director, guionista y productor. Hoy su herencia cinematográfica se presenta en Estados Unidos e irá a museos de aquel país".

Películas y documentales históricos

Había que recuperar películas perdidas y documentales históricos realizados por Herman, ya que Hollywood filmó obras que capturaban la revolución hippie en California, con imágenes inéditas de la era de oro, que hoy son de gran importancia para el gobierno de los Estados Unidos, ya que el cineasta sanjuanino supo capturar momentos únicos de protestas sociales en contextos de guerra y pedidos de paz, incluyendo arte, música y eventos deportivos significativos.

Sus películas incluyen escenas únicas de la revolución hippie y momentos históricos del fútbol mundial, destacando figuras en los mundiales, como Kempes en 1978 y Maradona en 1986, sobresaliendo precisamente filmaciones como "Argentina Campeón". Pero cuando su carrera en Hollywood estaba en ascenso tuvo que regresar a Argentina para ayudar a su padre, Saúl, aplicando su conocimiento en economía y marketing, para dejar a las empresas familiares en una óptima posición.

Una historia fascinante

Finalmente, el descubrimiento hace pocas semanas de las películas perdidas de Herman Goransky por su hijo Natán ha desvelado una fascinante historia, gracias a la digitalización que el propio Natán propuso llevar a cabo con la compañía Kodak en Estados Unidos, logrando rescatar una historia fílmica inédita y de gran valor para la cultura mundial. Un acto trascendental y de enorme orgullo para los argentinos y sanjuaninos en particular.

A pesar de aquel éxito, Herman no regresó a Hollywood y falleció sin ver completados sus sueños cinematográficos, entregando sus últimos años de vida a la instalación de la industria medicinal proveniente de la India, para abastecer de oxígeno a la provincia de San Juan y siempre de manera exitosa y heroica, junto a su familia.

Dos décadas después, sus películas, olvidadas en un depósito, son ahora redescubiertas por Natán Goransky, el joven de la gran tarea de recuperación y renacimiento del legado, con el apoyo de sus hermanos. Tan brillante labor acaba de ser presentada en el Festival Internacional de Cine de Venecia, generando un gran interés en la comunidad artística internacional y ya se trabaja en el ingreso de la obra de Goransky en los museos más prestigiosos de la costa oeste. Herman Goransky, un lujo para San Juan y Argentina en la historia grande de la de la cinematografía. 

 

Por Luis Eduardo Meglioli
Periodista