En este artículo cito al General Gerónimo Espejo, en su obra "El Paso de los Andes – Crónica Histórica de la operaciones del Ejército de los Andes”. Espejo fue soldado de San Martín desde los quince años y por ello el Liceo Militar de Mendoza, por donde han pasado centenares de jóvenes sanjuaninos, lleva su nombre.

El libro señala que en Yapeyú, departamento de la provincia de Misiones, en el antiguo Virreinato del Río de la Plata, nació el 25 de Febrero de 1778, Don José Francisco de San Martín. Su padre, Don Juan de San Martín fue el gobernador de ese departamento. En 1786 fue restituido a España con toda su familia, llevando a sus hijos, entre ellos al pequeño José, quien se había perfeccionado en Buenos Aires en la instrucción primaria. Cuando llegaron a España fue ubicado en el Seminario de Nobles de Madrid, el más aventajado establecimiento de su género. Se relata que era un niño muy notable.

San Martín llegaba al país en 1812 después de casi dos años desde el grito de libertad de Mayo de 1810. Lo hacía para consagrarse a la causa de la Patria.

A los 11 años fue incorporado como cadete del Regimiento de Murcia y así siguió grado por grado la carrera militar: 

Asistió a cinco campañas: Africa, Rosellón, Portugal, España contra la invasión francesa y en la Armada Nacional más de un año, a bordo de la Fragata de Guerra "Dorotea”.

Estuvo en 17 acciones de guerra en Europa: Plaza de Orán, Port Vendres, en la Baterías del mismo punto, Coliombré, Fragata de Guerra Dorotea, Torre Batera, Cruz de Yerro, Mauboles, San Margal, Baterías de Villalonga, Bañuelos, Alturas del mismo paraje, Hermita de San Lucas, Arrecife de Arjonilla, Batalla de Bailen, donde recibió una medalla y el grado de Teniente Coronel, Combate de Villa de Arjonilla, Batalla de Albuera, con tan buen comportamiento que fue hecho Teniente Coronel efectivo sobre el mismo campo de batalla. Su accionar como se ha visto fue en tierra y en mar, donde probó su valor y capacidad, y adquirió las prácticas que en la ciencia de la guerra tanto ilustraron su talento privilegiado.

El 15 de octubre de 1811, a los 33 años de edad y 22 de servicio militar sin interrupción, abandonó España, pasando a Inglaterra con el plan de trasladarse a América para contribuir con su libertad e independencia, ya que creyó que la voz de su tierra nativa llamaba en su auxilio.

El Teniente Coronel San Martín, se había desempeñado como primer ayudante de campo del General en Jefe, Marqués de Coupigni. Debió zarpar del Támesis el 19 de enero de 1812, desembarcando en Buenos Aires el 9 de marzo de 1812. La Gaceta de Buenos Aires, informaba , que ha llegado a este puerto la Fragata Inglesa "Jorge Canning”, procedente de Londres, con cincuenta días de navegación. Llegaba el Teniente Coronel de Caballería Don José de San Martín y el Capitán de Infantería, Don Francisco Vera, entre otros destacados militares quienes han venido a ofrecer sus servicios al gobierno y han sido recibidos con la consideración que se merecen.

La historia continuaría con San Lorenzo, La Campaña del Ejército del Norte, Cuyo con el Ejército de Los Andes, el Paso de Los Andes, Chacabuco, Cancha Rayada, y Maipú, para finalizar con la Campaña en el Perú, el centro más poderoso del dominio imperial español.

San Martín decía: "Yo Servía en el Ejército español en 1811, veinte años de honrados servicios me habían atraído alguna consideración , sin embargo de ser americano, supe la revolución de mi país, y al abandonar mi fortuna y mis esperanzas, sólo sentía no tener mas que sacrificar al deseo de contribuir a la libertad de mi patria. Llegue a Buenos Aires a principios de 1812, y desde entonces, me consagré a la causa de la América".

 

Por el Dr. Miguel Ángel Licciardi
Presidente Asociación Cultural Sanmartiniana de San Juan. Instituto Nacional Sanmartiniano.