Las palabras de deporte, salud, y desafíos provienen de alguna base antiquísima que tienen que ver con buscar alguna sanación de las heridas, en el ser perseverante, saludable. La salud en general consistiría en gozar de buena actitud física y mental. La salud es aquello que se tiene y que muchas veces no se valora, y que muy pocos se dan cuenta de que lo tienen ¿Para qué sirve ser millonario, sino puedes curar definitivamente el cáncer?


En épocas de pandemia muchos sufrieron las perdidas de alguna ser querido y temen contagiarse. Y, esto es así, porque la realidad de supervivencia es prioridad ante los chalets, cómodas piscinas y vacaciones soleadas de bronceadores, en el Caribe meridional. Al respecto, el filosofo Russell (filósofo 1872-1970), dijo: "La felicidad es preocuparse por las cosas cuando son relevantes".

La salud integral implicaría el gozar de un buena alimentación, no estar solos en problemas, abandono, rendimiento e igualdad de oportunidades.

Oportunamente, si las ideas actuales, en ocasiones, resultan ser un verdadero "jaque mate a la verdad", sirven acaso las ideas: ¿Las ideas actuales son relevantes o embotantes? ¿la ciencia salva del coronavirus? ¿Garantiza la técnica tanto la salud mental y corporal? ¿Se ha apoderado de la civilización un tipo de ser científico tecno al cual no le interesan los principios de la civilización? ¿Preocupa realmente u ocupa sinceramente a los Gobiernos la realidad del cambio climático y el impacto ambiental? ¿Se atiende la necesidad del hambre y la enfermedad como se debería? 


Es decir, "para los habitantes de barrios muy precarios, el paso cotidiano del hacinamiento al anonimato social que se vive en las grandes ciudades puede provocar una sensación de desarraigo que favorece las conductas antisociales y la violencia". No obstante, en este nuevo universo tecno del por venir la idea ya no resulta sacar una ventaja para dañar al contrincante, en el comienzo de la largada de una carrera, sino en ver realmente que soluciones llegan eficazmente, ante cualquier improvisación. Ya no está en juego la economía política solamente, sino la vida del planeta y la salud, tanto social, como individual de los ciudadanos. La estrategia ya no pasa por sostener la cultura solamente, sino también por alimentarla y cultivarla en el encuentro consigo mismo y con los demás en educación en las aulas de calidad. 


El ser tecno actual encuentra ideas dentro de si, a veces muy ideologizadas, pero sigue careciendo en la técnica, de la función de idear en la creación. Sigue en la función de los supuestos del opinar, en lo que "a mi me parece": Entonces, las ideas terminan siendo "apetitos, como las palabras bonitas, cómodas, tal bonanzas musicales irrelevantes". Hoy lo relevante es crear acciones, pero no sólo de acción directa en las calles, sino también las de aquellas que empiezan de a poco, silenciosas, pero que terminan contagiando de buena salud física y mental al universo. 


Tal cual, cuando se carece de salud mental, corporal, se pierde la esperanza, el ser, viene la desolación: "Cuando el dolor te roza con tiernas ausencias, el corazón se enoja. Palidecen los sueños, llora el viento en tu cuerpo, se empapan tus mejillas en llanto sin consuelo. Cuando el vino de la uva te hace llorar, esa pequeña náusea ante el aura mortal, resulta entonces ser el por venir, la llegada de la luz sanadora de verdadera emancipación". 

Por Diego Romero
Periodista, filósofo y escritor