Las tecnologías de la información y comunicación ya forman parte de la vida cotidiana y no podemos eludirla. Pero lo importante no es la tecnología, sino lo que hacemos con ella, lo que enseñamos, sus usos, posibilidades, y límites. Hoy, en un mundo 4.0 necesitamos una educación 4.0. Ello implica, entrar en saberes tecnológicos. Es una nueva manera de ser, frente al avance de las tecnologías. Significa modificar, cambiar y repensar, ya que nuestro contexto está cambiando. Es la llamada Cuarta Revolución Industrial, fusión de tecnologías digitales, físicas y biológicas.

El rol del ser humano se ve afectado y debe dar otra mirada no sólo en la producción sino también a nivel social. Es una nueva manera de ser, que está impactando sobre el mundo, y nosotros, somos quienes lo estamos transformando.

Podríamos hacer una breve historia y pensar que desde 1999 al 2015 estábamos en educación 1.0 donde lo que se buscaba era el acceso a la información, sin interactuar como fue el correo electrónico, que significó cambios de perspectivas. Después la educación 2.0 donde hubo un paso más, como compartir la información, las redes sociales. En consecuencia, todo va cambiando con las estrategias didácticas y la generación de nuevos ambientes de aprendizaje, por ejemplo, la telemedicina. Su apropiación nos llevó a la educación 3.0 más reflexiva, con nuevos espacios y paradigmas. Y especialmente, aprendizajes de calidad mediados por la tecnología. El mundo 4.0 requiere de un sistema de aprendizaje diferente, con otros perfiles. Ello va más allá de usar la tablet y redes sociales. "Se requiere talento y el talento, se desarrolla con el conjunto de conocimientos teóricos profundos, interdisciplinarios y competencias transdisciplinar, habilidades a una multiculturalidad y adaptación a ella.'' (Prof en Tecnología, Pedro Diez).

¿Qué necesita esta educación 4.0? Alumnos adaptables a la frustración, empáticos, líderes. Existe el temor a la robotización que pueda desplazar la mano del hombre, pero todo es gracias a la inteligencia humana. La educación 4.0 es un reto fascinante y tiene tendencias, cuya responsabilidades es de las instituciones, docentes mejorando la oferta educativa para transformarla. Esto permitirá que las tecnologías desarrollen en los alumnos talentos, capacidades, habilidades, competencias que se requiere en el aula y luego en el campo profesional. Las empresas requieren gente que sean emprendedores, generen ideas, mejoren ambientes de trabajo y la comunicación.

Un cambio de paradigma como es Educación 4.0 genera conocimientos de alto valor, competencias de disciplina, adaptación y especialmente talento como gran capital. El rol de la escuela es fundamental bajo modelos lineales. "La nueva educación tendrá que convivir en forma equilibrada con las tecnologías orientadas a la robótica, la realidad virtual, realidad aumentada, inteligencia artificial'' (Prof Edith Schmidtke Festo)

El ser humano no será reemplazado por una máquina, pues existe una dependencia mutua de interacción cuyo objetivo es agilizar procesos y métodos para ofrecer productos. La educación 4.0 implica competencias profesionales y podríamos decir que la educación técnica es como palanca de crecimiento a la industria 4.0.

La educación tecnológica es la semilla que encontrará en la industria 4.0 , el terreno fértil para el desarrollo de la nueva economía mundial, en la que nuestro país, tiene gran potencial.

Por Yolanda Quiroga