El acoso laboral es cada vez más común en todos los ámbitos laborales, sean empresas privadas, instituciones educativas o de gobiernos nacionales, provinciales o departamentales. Se manifiesta a través de actos hostiles, degradantes, humillantes, lenguaje verbal, mensajes por terceros, cambios de lugares, asignando tareas muy por debajo de las capacidades de cada uno, descuentos en sueldos, e intentando acorralar, cazar, avergonzar a los trabajadores. Algunos signos del acoso laboral incluyen las críticas consecuentes, desinformación deliberada, chismerío, calumnias, mentiras, asignación de tareas inapropiadas, sobrecarga de trabajo, comentarios burlones y muchas veces bromas insultantes. Quienes hacen este tipo de trabajo, utilizan cualquier medio, sea verbal, físico, amenazas, exclusión, discriminación, hacia la persona o a los grupos a los cuales van destinados estos acosos.

Desde donde nace el acoso, quien o quienes lo generan, usan cualquier medio para producir miedo o terror en los trabajadores que son víctimas del abuso de parte de superiores o personas usadas para este trabajo de violencia psicológica, injustificada, de forma sistemática y recurrente, por tiempo prolongado, por meses o años. Esta violencia laboral con la intimación, perturbación, hostigamiento hacia las personas, llevan consigo un solo objetivo: que abandonen el trabajo, que se cansen y se vayan.

Nadie piensa ni mide el daño psicológico que genera al acoso laboral, en quienes lo viven, ni siquiera imaginan cuánto daño dejan en las personas que lo viven, esto queda marcado a fuego y muchos terminan con depresión y problemas psicológicos para toda su vida.

¿Cómo defenderse de estas situaciones degradantes? ¿Cómo comprobar que lo viven o padecen al acoso laboral? ¿Quién defiende este tipo de realidades? Muchas veces no hay como hacerlo, ni siquiera con los mismos compañeros de trabajo como testigos, porque sienten miedo de quedar sin trabajo o ser tratados de igual manera que a la víctima.

Es crucial fomentar el respeto y crear un ambiente laboral positivo para prevenir este tipo de ambientes.

Es un hecho de que el acoso laboral es una violación a los derechos humanos, laborales que necesita defensa.

Área de Recursos Humanos
Es de fundamental importancia para una empresa, institución del Estado u ONG contar con un área de Recursos Humanos (RRHH) que asegure su buen funcionamiento, aumente su productividad y que haga eficiente la labor diaria. Para ello es también fundamental contar con un director capaz de encabezar con excelencia los procesos de reclutamiento, formación y manejo de personal; que cuente con habilidades comunicacionales y de liderazgo, y que sepa negociar y solucionar problemas, anteponiendo la empatía y organización. Debe tener la capacidad de analizar cada situación del personal a su cargo y ser capaz de relacionarse con personas de diferentes orígenes, respetando los principios de confidencialidad.

Un director de RRHH que es temido por su agresividad sobre sus inferiores, que se deja llevar por habladurías o chimentos de bajo instintos, o que juzga castigando a personas inocentes e indefensas es, sin lugar a dudas, una persona incompetente e inepto para ocupar estos cargos.

Por Rosa Alicia Barahona
Profesora de Educación Especial
Técnica en Administración de Empresa e Informática