Renovación completa de los espacios verdes, más y mejor iluminación, construcción de puentes, estacionamientos subterráneos y sanitarios; y dotación de más servicios. Todos esas obras forman parte de un ambicioso proyecto que Sergio Uñac y sus equipos técnicos vienen diagramando en silencio desde antes de asumir para transformar en forma íntegra el histórico y decaído Parque de Mayo, que seguirá en manos de la provincia. La iniciativa está en su etapa final e incluye la ampliación del mismo hasta el sector donde está el antiguo estadio abierto. Para que todo no se venga abajo en poco tiempo, la idea es que un equipo de operarios realice tareas de mantenimiento todo el día.
La megaobra, de concretarse, promete un fuerte un fuerte impacto en la vida cotidiana de miles de sanjuaninos. El Parque de Mayo es el principal pulmón de la ciudad y a pesar de que desde principios de la década viene cuesta abajo (Ver cronología), es una de las pocas alternativas que tienen a la vuelta de la esquina niños, adolescentes y adultos para descansar fuera de casa y practicar deportes al aire libre.
El proyecto está a cargo de un grupo de arquitectos, bajo la supervisión del ministro de Infraestructura, Julio Ortiz Andino. “Está muy avanzado”, contó el alfil de Uñac en materia de obra pública.
El plan se divide en tres. Una es la remodelación, lo que implica un nuevo sistema de iluminación, la recuperación de los espacios con césped, el trazado de nuevos circuitos para caminar y andar en bicicleta, la reparación y puesta en funcionamiento de las fuentes y la instalación de aparatos para hacer gimnasia. Otra es la demolición del estadio abierto, el velódromo y las oficinas del Boletín Oficial (Ver recuadro), para poder avanzar con la ampliación. Y la tercera consiste en grandes obras de infraestructura, como playas de estacionamiento, nuevos baños, una estructura aérea que unirá la “montañita” con el lago y puentes de conexión con otros sitios de la zona, como el Centro de Convenciones, el Centro Cívico, la Plaza Julieta Sarmiento, el Auditorio Juan Victoria y el Museo de Bellas Artes.
Ortiz Andino aseguró que “es un proyecto complejo y lo queremos hacer en tres etapas, una por año”. Mientras que Uñac no dio una fecha precisa para comenzar a ejecutarlo, aunque estimó que será en el transcurso de 2016. Eso depende, en gran parte, de la disponibilidad de recursos.
La remodelación podría ir por cuenta y orden de la provincia, pero para el resto hace falta una inversión varias veces millonaria (aún no hay cifras) y la gestión uñaquista ya está en conversaciones con empresas privadas para conseguir financiamiento. A cambio, podría concesionar los servicios adicionales que se ofrecerán en el Parque de Mayo y los lugares aledaños. Unos de ellos será el estacionamiento: la proyección es construir varias playas subterráneas y eso ofrecería una solución, por ejemplo, para las miles de personas que trabajan y asisten al Centro Cívico.
El estado del Parque, la limpieza y la pérdida de algunos de sus atractivos desataron críticas en distintas épocas por parte de aquellos que lo usan regularmente y en más de una oportunidad, hubo intentos para que su cuidado pasara a la Municipalidad de la Capital. El primero en plantearlo fue el exintendente Marcelo Lima y el último, su sucesor, Franco Aranda. El nuevo jefe comunal no tuvo suerte, ya que Uñac le hizo saber que su voluntad es mejorarlo y que seguirá dependiendo de la Dirección de Arquitectura.
Para que el trabajo no sea en vano, el gobernador aseguró que implementará un servicio de mantenimiento tiempo completo. Evalúa dos opciones: afectar a esa tarea a un grupo específico de trabajadores estatales o que lo haga una empresa privada, como sucedió hasta el 2002.
Un dato no menor es la feria de exposición de la Fiesta del Sol, que se viene haciendo en el Parque todos los años y no ayuda a su cuidado. La edición 2016 podría ser una de las últimas en ese lugar: “Estamos con la fecha encima y será ahí, pero cuando el Parque esté remodelado la queremos empezar a hacer en un predio que queremos construir”, aseguró Uñac.