Tan inquietas como siempre, las ocho mujeres que integran la Cooperativa Kuskalla, que preside Silvia Godoy, siguen buscando cosas que hacer, y esta vez por la comunidad. Se trata – nada más y nada menos- que de un proyecto destinado a alumnos de escuelas de Albardón para enseñarles la técnica de hidroponía que consiste en cultivar plantas sin utilizar suelo, empleando una solución de agua con nutrientes esenciales para su desarrollo. A eso se suman clases de cocina saludable que serán dictadas por el chef Mauricio Barón. La propuesta fue presentada hace un tiempo a la Fundación Arcor cuyos integrantes le dieron rápidamente la aprobación para acompañar esta novedosa iniciativa.
La primera escuela a la que llegó este proyecto fue la Vicecomodoro Marambio donde alumnos de primero a sexto grado ya cuentan -desde hace un semana- con los kits necesarios para comenzar a cultivar junto con un equipo interdiciplinario integrado por los docentes de Biología, Tecnología, y la asistencia de un ingeniero agrónomo y una nutricionista.
“Tuvimos la suerte de ser elegidas por la Fundación Arcor tras la presentación de un proyecto de alimentación saludable que nos permite llegar a la comunidad con un aporte para que los chicos lleven esta idea a su casa y creen su propia huerta y cocinen sus propios alimentos. Cuando conocimos esta oportunidad, de inmediato nos inscribimos, cumplimos con todos los requisitos porque había que tener todo en orden y nos aceptaron para el proyecto que consiste en que los alumnos de diferentes escuelas de Albardón aprendan a cultivar por hidroponia y también a cocinar saludable”, indica Silvia Godoy, presidenta de la Cooperativa Kuskalla dedicada a la fabricación de bolsas de tela para Argentina Fáctica, Espíritu Parrillero y para quien lo solicite.
Precisamente por tratarse de mujeres creativas que trabajan en este oficio es que también están cosiendo delantales para que usen los alumnos durante su tarea de agricultores.
“Comenzamos por la escuela Vicecomodoro Marambio donde fuimos muy bien recibidas por su directora aunque queremos llegar a muchos otros establecimientos del departamento. También hemos invitado a personas de merenderos para que aprendan esta técnica que consiste en cultivar en el agua y vean la diferencia respecto del cultivo en tierra porque la calidad de las plantas es muy distinta.
Con esta técnica las verduras no se contaminan como en la tierra, se recuperan más fácilmente, tardan menos en crecer, entre otras virtudes”, cuenta Silvia.
Por tratarse de un proyecto de alimentación saludable a partir de la producción de sus propias verduras, sumaron al chef Mauricio Barón, quien tendrá a cargo la tarea de enseñar a cocinar de una manera sana y nutritiva.
El equipo está integrado también por una nutricionista que aporta el Ministerio de Salud Pública de la provincia y un ingeniero agrónomo.
“Es un conjunto de cosas que apunta a que los chicos puedan asimilarlo y llevarlo a sus casas”, agrega.
Los kits entregados -dos grandes para 24 plantas y dos chicos para 16 plantas cada uno-, contienen caños de PVC, macetas y una especie de batería que dosifica el agua necesaria para cada planta, con lo cual se reduce su uso de manera significativa sin producir ningún tipo de derroche.
Los alumnos podrán cultivar lechuga, rúcula, espinacas, zanahorias, beteravas, aromáticas, entre muchas otras “Nos hubiera gustado empezar con más escuelas pero no se ha podido. Vamos a ir entregando kits en la medida de las posibilidades para luego hacer un gran cierre de año con todo lo aprendido”, asegura la presidente de Kuskalla cuyas integrantes sólo persiguen el fin de colaborar con la comunidad en un tema tan sensible como es la producción de sus propios alimentos.
Por su parte la Fundación Arcor ha entregado un millón y medio de pesos para la compra de los insumos necesarios para aportar a las escuelas.
“Nuestra máxima aspiración es que los chicos aprendan, puedan hacerlo en sus casas para luego venderlos porque no hacen falta grandes espacios ni tierra donde hacerlo. Además son productos muy limpios porque en las huertas los animales pueden hacer sus necesidades y acá no”, explica Silvia.
> AGUA Y NUTRIENTES
La falta de tierra ya no es un pretexto para dejar de cultivar. Sólo se trata de aprender las nociones básicas de la hidroponía para poner manos a la obra. Se trata de una técnica de cultivo que ofrece múltiples beneficios, como por ejemplo la calidad de la hortaliza plantada. Claro que para muchos es poco conocida por eso la importancia de llegar a alumnos de diferentes escuelas y así trasladarlo a sus familias.
Eduardo Manzano será el ingeniero agrónomo encargado de brindar los conocimientos para que los chicos aprendan a cultivar en agua, tal como lo propuso la Cooperativa Kuskalla.
“En primer lugar hay que reconocer que las cosas no siempre funcionan tan bien con los métodos tradicionales y que la tierra no es necesaria para ayudar a que las plantas crezcan grandes y fuertes. De hecho la hidroponía es básicamente un proceso en el que se distribuye el agua, asegurándose de preservar la calidad y proporcionando los nutrientes que la planta necesita para alcanzar su máximo potencial”, indica Manzano.
El tema es que si una familia decide hacer su huerta en el jardín depende de muchos factores para su buen desarrollo, y si bien la tierra tiene nutrientes que las plantas necesitan para estar fuertes y saludables, no pueden sacarlo todo por sí mismas.
“Más bien, espera a que llegue la lluvia para que libere los nutrientes y se los de a las plantas. Pero cuando no llueve o no se riegan como corresponde, no solo se deshidratan los cultivos, sino que los nutrientes se mantienen lejos de las plantas. Por este y otros motivos se puede usar la hidroponía”, agrega.
El objetivo de este proceso es hacer una réplica del entorno natural, pero para que esto funcione mejor, hay que agregar nutrientes al agua y así enriquecer las plantas en el proceso. Cuando los nutrientes adecuados están en su agua, las plantas pueden absorberlos y crecer más sanos y fuertes.
“Si este proceso se realiza correctamente, las plantas podrán crecer mejor que en el propio jardín u otro lugar al aire libre. La solución de nutrientes a menudo depende de cada uno. Por lo general, se necesita hacer un sistema cerrado para mover esos nutrientes al lugar correcto. Las opciones que existen son excelentes porque también pueden evitar el problema de la evaporación para que las plantas puedan obtener todo lo que necesitan sin que el agua se evapore. No hay que preocuparse que se pierdan en el suelo o que el agua desaparezca antes de que se absorban”, agrega.
> LOS BENEFICIOS
•Mejor salud: cuando se cultiva con hidroponía, se proporciona mejor composición de nutrientes. También se evita que las plagas y las malas hierbas entren en el sistema para que las plantas puedan obtener todo lo que necesitan sin problemas.
•Mayor producción: Como no hay tantas plagas se puede sacar más provecho de cada planta. No habrá que esforzarse tanto para mantenerlas alejadas de las malas hierbas. Esta es una manera fácil de obtener alimentos.
•Asequible: La hidroponía es realmente fácil y asequible, por lo que es una de las mejores formas de hacer una gran cosecha.
•Menos tiempo: No demanda demasiadas horas de trabajo. Por ejemplo, no hay que dedicar tiempo a cultivar la tierra, regar todos los días y trabajar para mantener alejadas las malas hierbas y las plagas. Solo hay que asegurarse de que la planta tenga suficiente agua y que el contenido de nutrientes sea bueno para que estén listas para crecer.
•Más productividad: las plantas que se siembran con hidroponía pueden madurar más rápido en comparación con las que crecen en el suelo. Esto significa que se pueden realizar más cultivos durante el año, por aproximadamente el mismo costo.
•calidad: hay mucho para disfrutar cuando se trata de un jardín hidropónico. La comida se ve mejor y sabe mejor.

