Irán lanzó unos 100 misiles contra Israel, que desplegó la Cúpula de Hierro defensiva para contener ese masivo ataque que llegó luego de que las Fuerzas de Defensa Israelíes (FDI) hayan destruido a gran parte del brazo armado de Irán en la región, es decir, a Hezbollah.
El premier israelí sostuvo que Teherán “pagará” por la ofensiva, dejando entrever que su gobierno ya prepara un plan de ataque sobre “la línea de fuego” que comprende Líbano, Siria e Irán.
De esta manera, el combo explosivo que siempre amenaza con detonar en la región, empieza a dar señales de una guerra a gran escala en Oriente Medio con incontables pérdidas de vidas humanas y destrucción. Por lo pronto, ya sacudió el tablero económica ya que por este ataque ayer subió 5% el precio internacional del barril de petróleo. Es decir, que ya se licúo la baja de las naftas en Argentina que rige desde ayer, por la baja que venía experimentando el crudo.
Algunos de los misiles fueron interceptados por el sistema de defensa antiaérea Arrow, informó el noticiero de la televisión estatal israelí Kan TV. Se escucharon sirenas en Jerusalén y los residentes locales buscaron refugio durante el ataque, informaron corresponsales de la agencia de noticias Xinhua. También se escucharon fuertes explosiones.
Aún no se informó de víctimas, pero el servicio de rescate Magen David Adom indicó que un edificio resultó dañado en el norte de Tel Aviv. Por otra parte, el Cuerpo de los Guardianes de la Revolución Islámica de Irán indicó que atacó Israel con decenas de misiles balísticos, informó la televisión oficial iraní IRIB TV.
Incluso se escucharon sonar las sirenas en el centro de Israel, según informó la agencia de noticias Xinhua y ambos países prometen intensificar los ataques. La región es un polvorín descontrolado.

