Mientras la multitud desfila sin tregua con horario extendió para visitar la capilla ardiente y así poder despedir al papa Francisco, el servicio de prensa de la Santa hizo pública ayer la primera foto del lugar que a partir del sábado ocupará la tumba del pontífice argentino, en la Basílica de Santa María la Mayor.

Y el portavoz de la Santa Sede, Matteo Bruni, adelantó que la misma podrá ser visitada a partir de la mañana del domingo 27 de abril, un día posterior a las exequias.

La tumba será sencilla, en el suelo, y contará con una reproducción de su crucifijo pectoral, según se puede ver en la imagen. Estará realizada con mármol de Liguria, región del noroeste de Italia de donde son originarios una parte de los ancestros italianos del pontífice argentino.

La sepultura se encuentra en la nave izquierda de la basílica que él eligió en vida para reposar, en vez de la cripta vaticana, y tendrá una lápida en el suelo con la inscripción “Franciscus”, su nombre pontificio en latín, tal y como dispuso en su testamento.

En la pared mostrará una representación de la cruz pectoral del papa, en plata con la imagen del Buen Pastor.

La tumba estará entre la Capilla Paulina, que alberga la Virgen ‘Salus Populi Romani’, de la que Francisco era muy devoto, y la de la familia Sforza.

En concreto, en un lateral del altar de San Francisco, el santo de los pobres de quien Bergoglio adoptó su nombre pontificio. El entierro del jesuita argentino será el primero de un pontífice fuera del Vaticano desde León XIII en 1903.

Cosa de familia. El mármol de la tumba fue llevado de Liguria, región de Italia desde donde migraron los padres de Francisco rumbo a la Argentina.

Francisco, fallecido el pasado lunes con 88 años de edad, será enterrado en este lugar el sábado, tras su funeral de Estado que contará con la presencia de 50 jefes de Estado y 130 delegaciones confirmadas.

Francisco solía acudir a este templo ya desde antes de su elección pero, en sus más de doce años de pontificado, lo visitaba sobre todo antes y después de cada viaje apostólico para encomendarse a la ‘Salus Populi Romani’, “protectora de los romanos”.

Conocida también como Nuestra Señora de las Nieves, se trata de un icono de origen bizantino de la Virgen con el Niño en brazos muy venerado por los romanos y que la tradición sostiene que fue realizado por san Lucas Evangelista, el patrón de los pintores.

La última vez que Francisco oró a los pies de dicha virgen fue el 23 de marzo, cuando salió del hospital Gemelli de Roma después de 38 días internado por sus graves problemas respiratorios.

El cuerpo del pontífice ha sido expuesto en la basílica de San Pedro del Vaticano para permitir a los fieles cada día darle el último adiós incluso más allá de la medianoche, hasta las 5 de la tarde de este viernes cuando se clausurará el féretro.

Bergoglio, siempre fiel a su estilo humilde, había dejado escrito en su testamento su voluntad de que el sepulcro esté “en la tierra, sea simple, sin un decorado particular” y solo señalado con una única inscripción: ‘Franciscus’, su nombre pontificio, en latín. Además, los gastos de preparación de la sepultura serán cubiertos por un benefactor que encontró en vida y que permanece anónimo.

El cortejo fúnebre que este sábado acompañará el cuerpo del Papa desde la Basílica de San Pedro hasta la Basílica de Santa María la Mayor, se realizará “a paso de hombre, para permitir el saludo” de la gente, informó el Vaticano. Además habrá una transmisión televisiva en directo que se detendrá en la entrada de la basílica, porque el entierro será un evento privado.

Milei. Recordó a Francisco.

“El argentino más grande de la historia”

El presidente de la Nación, Javier Milei, se refirió al fallecimiento del papa Francisco y aseguró que fue “el argentino más importante de la historia” y remarcó que quienes tuvieron la posibilidad de conocerlo en persona, saben que “era un líder impresionante”.

En declaraciones a Radio Rivadavia, al ser consultado sobre si iba a estar presente en el funeral del Sumo Pontífice en el Vaticano, confirmó su presencia y aseveró que ‘no puede dejar de asistir a un evento de esta altura”.

Milei viajó anoche hacia Roma donde estará presente en el último adiós al Papa Francisco y solo tendrá “contactos formales” con el resto de los presidentes que asistan, como es el caso de Donald Trump (Estados Unidos), Giorgia Meloni (Italia) e Inacio ‘Lula’ da Silva (Brasil).

El funeral de Francisco se llevará acabo este sábado a las 5 de la mañana (hora argentina) en la Basílica de San Pedro y el Presidente estará allí junto a seis funcionarios que lo acompañarán: la secretaria General de la Presidencia, Karina Milei; el jefe de Gabinete, Guillermo Francos; el vocero presidencial, Manuel Adorni; el canciller argentino Gerardo Werthein; y las ministras Patricia Bullrich (Seguridad Nacional) y Sandra Pettovello (Capital Humano).

  • El cierre de una era
    ‘Se ha cerrado un capítulo de la historia de la Iglesia’, dijo el cardenal Gerhard Ludwig Mueller ayer al diario italiano La Repubblica. Mueller es uno de los 135 cardenales con derecho a voto en el cónclave secreto para elegir al pontífice número 267 de la Iglesia.
Miles. Ni la llovizna de Roma frenó el ánimo de los fieles para despedir al Papa.

> “Tenía los ojos abiertos”, revelaron

El papa Francisco murió rápidamente el lunes por la mañana a causa de un inesperado derrame cerebral, sin sufrir dolor excesivo, y no hubo nada que los médicos pudieran haber hecho para salvar su vida, dijo el jefe del equipo médico del hospital Gemelli de Roma que estuvo al frente del tratamiento del pontífice mientras estuvo internado 38 días por bronquitis y neumonía bilateral.

Sergio Alfieri recibió una llamada telefónica alrededor de las 5:30 de la mañana el lunes para venir rápidamente al Vaticano y llegó unos 20 minutos más tarde.

‘Entré en sus habitaciones y él (Francisco) tenía los ojos abiertos’, dijo el médico al diario Corriere della Sera. ‘Comprobé que no tenía problemas respiratorios. Luego intenté llamarle por su nombre, pero no me respondió’. ‘En ese momento supe que no había nada más que hacer’, dijo Alfieri. ‘Estaba en coma’.

Alfieri dijo que algunos responsables que estaban con el papa sugirieron volver a trasladarlo inmediatamente al hospital. “Habría muerto en el camino”, dijo el médico. “Haciendo una tomografía computarizada habríamos tenido un diagnóstico más exacto, pero nada más. Fue uno de esos infartos que, en una hora, te llevan por delante”. Francisco tenía 88 años y había estado a punto de morir mientras luchaba contra una neumonía, pero su muerte ha causado una conmoción. Justo el día anterior había aparecido en la plaza de San Pedro en un papamóvil al aire libre para saludar a la multitud que lo aclamaba el Domingo de Resurrección, lo que indicaba que su convalecencia iba bien.

Contó que el sábado que le regaló al papa un poco de tarta del sabor que le gustaba.