Después del papelón que significó anular el inicio del histórico primer juicio del sistema acusatorio federal local, en una causa ‘compleja’ contra 10 acusados de integrar un grupo (‘La Banda de los Rosales’), dedicado al comercio de drogas, principalmente en 9 de Julio, todos admitieron su responsabilidad en un juicio abreviado a cambio de una rebaja de pena. Y ayer un tribunal les impuso castigos de entre 6 años y medio y 2 años, pero solo dos de ellos seguirán en la cárcel: Franco Marcelo ‘Gordo’ Carrizo y Sergio Maximiliano Rosales. Los demás recibieron penas en suspenso o a cumplir con la modalidad domiciliaria.
El 8 de mayo pasado, el juez del Tribunal Oral Federal, Daniel Doffo, anuló el inicio del debate al considerar que, por la escala penal de los delitos en juego (con castigos de hasta 20 años) debía intervenir un tribunal. Entonces el fiscal, Fernando Alcaraz, se opuso y la causa tuvo que ser resuelta por una jueza de un tribunal nacional, que falló a favor de la posición del juez, por un condimento clave: el fiscal federal nacional, Raúl Pleé, no adhirió a los argumentos de su par Alcaraz y sí a los del juez Doffo. Sin embargo Doffo fue apartado del caso y pasaron a intervenir sus pares Alejandro Piña, Gretel Diamante y Pablo Salinas.
Cuando todo indicaba que el juicio se reiniciaría con la declaración de testigos, peritos, escuchas telefónicas, la exhibición de videos y fotos recolectados por los policías de Drogas Ilegales para probar la vinculación de todos los implicados, las partes acordaron un juicio abreviado.
Así, a cambio de una rebaja de pena, el principal cabecilla de ese comercio agravado de drogas, Franco Marcelo ‘Gordo’ Carrizo (lo defendió Claudio Vera) aceptó y recibió un castigo de 6 años y 6 meses de cárcel. Quienes recibían la ilícita mercancía en 9 de Julio, María Eugenia Parra, fue castigada a 6 años, y su pareja Sergio Maximiliano Rosales a 4 años y 6 meses de cárcel.
La investigación realizada por Drogas Ilegales entre el 5 de agosto y el 29 de noviembre del año pasado, demostró que esta pareja, a su vez, distribuía la droga en otros parientes, como Evelyn Ríos (fue castigada a 3 años en suspenso) y su hermana Noelia (recibió 4 años y 6 meses de pena); Miguel Parra (le dieron 3 años sin encierro), Isaías Varela (recibió 3 años); Milagros Rosales (le aplicaron 3 años) y su hermana Priscila (le dieron 4 años). Estos imputados fueron defendidos por Manuel Giménez Puchol, Gabriel Rosales y el defensor oficial, Esteban Chervín.
El comerciante Angel Andrés ‘Gallego’ Gunella (defendido por Rubén Pontoriero) recibió el menor castigo: 2 años en suspenso. En varias ocasiones, llevó en su auto a Carrizo para dejar la droga en 9 de Julio.
En los allanamientos, habían incautado 590 gramos de cocaína, 9 gramos de marihuana y 17 plantas de esa hierba, hongos alucinógenos, balanzas de precisión, $2.256.060, objetos para fraccionar, teléfonos y cinco vehículos, entre otras evidencias.