Fue un vendaval de divas -e histórico-. Mirtha y Susana juntas en la Fiesta del Sol. "Le va a matar el punto a la Vendimia", dijo convencida. Sentimiento legranesco que despertó la furia mendocina y pronunció su versus. Pero la Reina dice lo que piensa y está más allá de los ecos. La misma que encantó con su sapiensa, su elegante -y querible- protocolo, la que recicló especulaciones -fue más humana que Diva y más pueblo que Susana- y la que pregonó belleza freezada -perpetuada desde sus películas en blanco y negro-. Antes de participar el próximo sábado como madrina de La Vendimia -y en medio de la polémica por sus declaraciones-, charló con DIARIO DE CUYO y recapituló su visita a la provincia.

– ¿Qué más necesita la Fiesta del Sol para federalizarse?

– Está en condiciones de hacerlo, pero necesita más prensa nacional y a nivel internacional. Todos deberían conocerla. Es una lástima que se sepa tan poco lo que sucede en el interior. Sobre todo, porque no se ven similares en otras partes del mundo. Sin dudas, Cuyo está a la cabeza de las fiestas multitudinarias y espectaculares.

– Ud. ayudó a San Juan con el terremoto de 1944 ¿Tiene pensado hacer algo para el de Chile?

– Voy a ir a la embajada de Chile para decirle que estoy a su disposición. Tengo mi bisnieto chileno, el hijo de Juanita (su nieta) y Gonzalo Valenzuela y es un país que aprendí a querer a través de los años.

– ¿Qué recuerdos revivió en la Casa de Sarmiento? Su mamá era docente. Toda una regresión a la infancia…

– Sí, es así. Visitar la casa fue como volver a esa época. Mi mamá era maestra de directores y a mí me enseñó a querer a Sarmiento. Uno piensa en la provincia y piensa en el gran sanjuanino. Me emocionó ver los objetos auténticos y la higuera (N de R: la que se ve en la foto). Tanto me impactó la casa y el cariño de la gente, que hasta he soñado con eso.

– Ese tour desmitificó un mito. La gente creía que su porte marcaba distancia, pero se mostró más cercana que Susana. Mientras ella prefirió el hotel, Ud. visitó la casa sin problemas.

– Es que a mí me encanta la gente y los sanjuaninos me demostraron mucho cariño. No soy defensora de Susana Giménez, pero no fue porque ya la conocía del año pasado. Ella misma me insistía para que vaya.

– Cacho Castaña dijo que a ella "los hombres se le arriman por guita". ¿Ud. la aconseja al respecto? Damián Popiloff hace ruido…

– No. No entro en esos temas porque son muy privados. Ella es una mujer grande y sabrá por qué lo elige. Lo que sí puedo decir es que si está con él, es porque lo siente. Susana es muy enamoradiza.

– Firmó el libro de visitas de la casa de Sarmiento con un ¡Viva la Patria! ¿Vive o está en coma la Argentina?

– Creo que está tratando de salir de terapia intensiva. Está difícil la cosa. Las autoridades pintan un país que no es el real.

– ¿Por qué al gobierno K le molestan tanto tus observaciones sociales? ¿Sobrevuela la censura de la intolerancia?

– No le gustan las críticas y lo hacen notar. No creo que el presidente de un país tenga que hacer tanto hincapié en las críticas. Antes debería tratar de sacar la Nación adelante y administrarlo bien. No es necesario el ataque. Cuando se vive en democracia hay que tolerar el disenso.

– ¿Cómo vio al San Juan de Gioja?

– Espléndida. ¿Sabe que me sorprendió? La vegetación. Le pregunté cómo hacían para tenerla en una zona tan desértica y me explicó sobre el sistema de riego que tienen. También me gustaron los edificios, la limpieza de la ciudad y las veredas anchas. Me pareció una ciudad armoniosa y encantadora.

– Ud. dijo que no coincidía con él en muchas cosas ¿En cuáles?

– Seguramente en su posición kirchnerista, pero tampoco estoy muy al tanto de su tarea en la provincia. No quiero entrar en detalles porque ha sido muy amable y generoso conmigo. Me acompañó en todo momento.

– Estrella de oro, millonaria y querida. ¿Entregada al disfrute o queda alguna meta boyando?

– Mire, mi vida y mi carrera han sido milagrosas. Tenga en cuenta que soy una mujer grande, que sigo trabajando y que mantiene su poder de convocatoria y el cariño de la gente. Estoy muy agradecida de todo, pero algo habré hecho para merecerlo.

– Luego de sus vacaciones: ¿América, el Trece o el 9? ¿A dónde pondrá el gancho?

– Descarte el Trece y el 9. Probablemente siga en América.

Por último, ¿vino sanjuanino o mendocino?

– (risas) Cuyanos.