Nacida en el municipio español de Huelva, completó su formación entre las ciudades de Sevilla y Madrid, siendo adoptada por la primera, donde se radicó y se desempeña profesionalmente. Palmira Durán Serrano es una de las bailaoras más reconocidas y solicitadas para los tablaos.


Tras iniciar sus estudios a los 6 años de edad; hoy, tiene una importante trayectoria en los escenarios dentro y fuera de España, y también en la docencia, con sus técnicas de zapateado y de cuerpo, coreografía, palos del flamenco y estructuras.


En su visita a San Juan, se encuentra dictando un seminario y, esta noche, arrancará con la primera de las tres funciones con la que hará su debut en el Salón Auditorium del Teatro del Bicentenario, donde agotó entradas para las dos primeras veladas y mañana hará una tercera a las 19.30 (ver aparte). En el marco de la 3ra edición del ciclo flamenco 2019 dirigido por María de los Ángeles "Cuky" Maestro e Instituto de Danzas Cádiz, la artista interpretará la esencia del pueblo gitano junto a las bailarinas locales Alejandra Minet y Cuky, con el acompañamiento de los mendocinos Diego Lorenzo en guitarra, Leo Landa en percusión y Mauro Bianchinelli en saxo. Feliz por el recibimiento de los sanjuaninos, Palmira charló con DIARIO DE CUYO sobre el ritmo que para ella es el más "visceral" de todos, su difusión, la vocación y los secretos para convertirse en una bailarina destacada; previo a la selección de dos alumnas para cumplir una beca de cursado por un mes en España, premios que no incluyen estadía y pasaje, sólo el costo del perfeccionamiento que oscila los $200 euros.


- ¿Considerás que el flamenco es una moda o una pasión?
- Yo lo vivo como una pasión. Creo que una moda no es, porque el flamenco existió desde siempre y hace mucho se practica. Se hizo internacional, como consecuencia de la globalización y de eso ya no hay vuelta atrás.


- El peligro de la globalización es que también puede crear fenómenos pasajeros...
- Pero, para mí, el flamenco no es un arte de masas. Gusta a muchas personas en muchas partes del mundo, pero no todos se enganchan. Es un ritmo que va llegando poquito a poco, es un arte que a quien le llega, le queda. Esto no es una cosa de ahora, desde hace muchos años, los artistas de flamenco giran por todas partes, yo tengo 30 años, y ya la generación anterior a la mía pasaba medio año en gira. 


- ¿Y en la actualidad?
- Hay más competencia. Está más diversificado el trabajo. Hay que hacer más cosas diferentes, trabajar en tablaos, giras, espectáculos...


- ¿Por qué tuvo más difusión el flamenco y no otro ritmo nacido en España?
- El flamenco va directo al corazón, es visceral y emocional; eso no lo tiene otra modalidad.


- ¿Qué cualidades se deben poseer para ser una buena bailaora?
- Ganas, es lo primero, porque hay que dedicarle mucho tiempo y si no tienes eso, se hace complicado; y también curiosidad por conocer. Es una danza complicada porque hay que conocer de cante, de guitarra, de baile; hay que tener interés por todo.


- ¿Se debe cumplir con alguna condición física?
- Yo no creo mucho en lo de las condiciones, con trabajo todo se puede conseguir. Por lo menos, en el flamenco, se pueden conseguir muchas cosas trabajando el cuerpo. No creo que alguien deba tener determinadas condiciones. Estar sano y físicamente saludable es suficiente.


- ¿Te sorprendió la cantidad de bailarinas dedicadas a este tipo de danza en la provincia?
- Según tengo entendido, hasta aquí llegaron muchas personas dedicadas al flamenco y hay como un arraigo de eso, mucha fusión y, eso, se nota que ya está incluido. La verdad, fue una sorpresa. 


- ¿Y que nivel apreciaste en las clases?
- Hay mucha variedad. Ya hice un cursito para peques de 5 a 9 años y luego comencé con otro a partir de 12 años que incluyó hasta mayores. Se nota que hay gente que le dedicó más tiempo y gente que menos. Si bien, es en el intermedio donde suele haber más cantidad de inscriptos; hicimos un curso básico, un intermedio y uno avanzado y, la verdad, es que hay bastante en todos, está muy equiparada. ¡Estoy contentísima! Son muy ricas las clases. Estamos haciendo diferentes palos del flamenco y lo que siempre intento enseñar es que más importante que el paso que hago es cómo lo hago, utilizando siempre la emoción. No me gusta que me copien exactamente como hago determinados movimientos con los brazos, por ejemplo; me gusta que cada bailaora saque su forma de hacerlo, que encuentre su propio estilo y personalidad.


- ¿San Juan es la primera ciudad de Argentina en la que hacés pie?
- ¡Sí! Me ha gustado mucho, me ha llamado la atención la ciudad, es muy diferente a las que conozco. Nunca había venido a Argentina, es mi primera vez. ¡Estoy encantada!


DATO

  • Tras dos agotadas, la tercera función será el jueves a las 19,30. Tikets: $350 en boletería del teatro, de lunes a sábado de 10 a 20 y en sistema tuentrada.com.


(creditos Marcos Urisa)