No es exagerado decir que en YouTube hay videos de prácticamente todas las actividades humanas. Por eso, se pueden encontrar en esa plataforma algunas categorías impensadas, de videos que pueden servir para relajarte o aprender algo nuevo.

Mirá en esta nota tres categorías algo extraña que tienen miles y miles de videos para entretenerte durante un rato mientras esperás que pase el aislamiento obligatorio.

Speedrunning

Los videojuegos ocupan una parte importante de YouTube. Hay contenido de personas jugándolos, haciendo críticas, adelantando nuevos lanzamientos y modificándolos. Pero no hay tantos videos tan interesantes como los de los speedrunners, un término que literalmente se traduce por "corredores de velocidad".

Estas personas se concentran en terminar los juegos lo más rápido posible, ya sea de manera "normal" o utilizando fallas que les permitan bajar el tiempo total que se demoran en completarlo. Es sorprendente ver cómo estas personas terminan en pocas horas o minutos algunos títulos que en nuestra infancia o adolescencia nos llevaron hasta días, o directamente nos parecían imposibles de terminar.

Torneado de madera

 

Si algo parece sobrar en YouTube son videos de manualidades. Pero algunos son muy mediocres o parecen sacados de Utilísima como para ser realmente interesantes. Los de torneado de madera son completamente diferentes. La habilidad requerida para conseguir estas creaciones a partir de un tronco es increíble, y el proceso se disfruta de principio a fin.

Los videos pertenecientes a esta categoría podrían estar incluídos en el fenómeno conocido como ASMR, que son los que buscan generar una sensación extremadamente placentera en quien los ve, utilizando sólo los sentidos del oído y la vista.

Comedores competitivos

 

Todo lo contrario al torneado de madera, los videos que muestran las hazañas de los comedores competitivos no son particularmente relajantes, pero sí impresionan por el límite extremo al que llevan al cuerpo humano.

En este apartado hay un poco de todo, pero las imágenes más sorprendentes llegarán de la mano de los "expertos", es decir, los comedores competitivos que estén más arriba en el ránking mundial de esta disciplina, como Matt Stonie o Molly Schuyler. Muchos de sus "logros", como comerse un cabrito entero para terminar con la maldición que aquejaba a un equipo de baseball, no son para los débiles de estómago. Un subgrupo de este género son los comedores de comida picante, como el imposible Johnny Scoville.