Soledad Pastorutti será la estrella que cierre la XXX Fiesta Provincial de la Semilla y la Manzana Iglesia 2017, mañana a la 1.30, en el Anfiteatro Los Manantiales (ver aparte). Así, ella arrancará su temporada festivalera en San Juan.
"El Huracán de Arequito" dejó sus minivacaciones de lado para dialogar con DIARIO DE CUYO, antes de su arribo por primera vez al pueblo iglesiano, dato que no pasó por alto: "Siempre voy a San Juan pero es la primera vez que voy a ese departamento", comentó.
- ¿Qué ocurre en vos cuando te suceden estas cosas a casi 21 años de transitar las rutas argentinas?
- Me sorprendo porque recorrí mucho el país y es tan grande que no puedo creer que todavía queden lugares a los que no fui.
- ¿Te acordás del temblor que los sorprendió cantando junto al Chaqueño, Los Nocheros y a vos que estabas embarazada?
- Sí. Yo veía que la gente se iba y pensaba: "¿Tan fiero estamos cantando?". Yo pensé que era un mareo propio de mi estado, no miraba las luces. Otra deuda es ir como solista a la Fiesta del Sol.
- ¿Te animaste a cantar alguna tonada sanjuanina alguna vez?
- Me critico no cantar repertorio cuyano. No sé por qué, quizás porque desconocemos bastante.
- Una materia pendiente...
- Estamos en falta y a futuro es un reto para nosotros el repertorio de Cuyo. A lo mejor, me animo a abordar un temita de la zona para esta ocasión, como homenaje.
- Un desafío para sumar a la hora de los balances. ¿Qué rescatas a casi 21 años de carrera?
- ¡Ya la mayoría de edad! Todo arrancó a partir de Cosquín con una intensidad inesperada. Yo vivía tranquila en mi pueblo y comenzar a vivir como una figura pública fue difícil. Lo que destaco, sobre todo, es que sobreviví a la vorágine del éxito. La suerte está, sí, pero uno pone el cuerpo, el alma y deja su casa, aunque el encuentro con el público haga que valga la pena.
- ¿Qué recuerdo guardás como oro?
- Consagrarme con 15 años en el Festival de Cosquín fue muy fuerte y lo tengo presente. Pero todo lo que vino después me sorprendió más, porque el público me dio una oportunidad que creo no haber desaprovechado.
- ¿Qué es lo que más valorás?
- Más allá de la música, me emociona el encuentro de almas en los shows. Es una magia que no generé yo, ni tampoco el público, se generó; y a mí me llama a seguir.
- ¿Hoy, como madre, es complejo salir de gira?
- Lo que más me planteo y me duele es el tiempo con mis hijas, la más chica que cumple 4 en febrero y la otra que cumple 7 en junio.
- ¿Tienen veta de artista?
- Son muy histriónicas pero no quiere decir que vivan de eso el día de mañana. Espero es que aprendan que si no hay sacrificio no hay premio, yo me crié en otro contexto, mi papá era mecánico y llegábamos a fin de mes con lo justo, siempre se los recalco.
- Mientras tanto, ¿otra forma de continuar tu profesión es haciendo dúos con cantantes latinos?
- Yo lo busco a eso en mis deseos, como me pasó con Franco de Vita, Carlos Vives y Santana, y cantar para el Papa. Todo eso hace que uno aprenda, porque no sabés cómo vas a actuar, podés hacer un papelón como no.
- ¿La pantalla ayudó a diversificar tu camino pese a que hubo polémica en torno a Ecos de mi tierra, el programa que conducías en la TV Pública?
- Sí. Lo que pasa es que en estos rubros es complicado explicar la cantidad de gente que trabaja, no soy sólo yo. La suma parece terrible pero cuando la empezás a dividir, ves la diferencia.
- ¿Y ahora cómo se viene tu futuro? ¿Te convocó Tinelli?
- Puede ser que haga algo en televisión. Ir al Bailando no va con mi perfil.
- ¿Qué fue de esa adolescente que conquistó a los coscoínos?
- A los 15, tuve un pico de éxito. Después vino una meseta en la que siguió gente al lado mío y otros ni me registraron, ahí te das cuenta que lo importante es hacer las cosas bien. En definitiva, de las crisis que tuve cuando me separé de mi antiguo representante y de César Isella, es cuando más aprendí y por eso sentí que
yo tenía que equivocarme, no los otros por mí.
- ¿Lo planeaste así?
- Nunca hice las cosas por un resultado. En mis comienzos, convertirme en la artista que me convertí en estos años no estaba en mis planes. El cantor de folclore lo que sueña es llegar a Cosquín, todos mueren por eso y era lo que me pasaba y me sigue pasando, porque es el lugar donde rindo examen todos los años. Pero todo es constancia y equivocarse también.
Hoy y mañana
Hoy será el carrusel por Av. Santo Domingo. Luego, en el Paseo del Bicentenario, se realizará la elección de la reina y cantará Javier Acuña, Destino San Javier (banda sucesora del Trío San Javier); el gran hermano Brian Lanzelotta, Atómica Music de Bs. As. y los cuarteteros cordobeses de La Fiesta. Mañana, la Sole actuará en el Anfiteatro Los Manantiales a la 1.30, como broche de oro. La apertura será a las 21, con la bendición de los frutos y la actuación de Americanto, el humorista cordobés Jorge Tissera y Nacho y Daniel, dúo nacido en Córdoba. Entrada: $150 cada velada.