Natalia Oreiro volvió a hablar del acoso sexual que sufrió en 2012 en manos de un colega, mientras grababa la miniserie Lynch. Aunque en su momento la mujer de Ricardo Mollo ya había hablado de la ultrajante situación que tuvo que vivir en el set, la actriz reveló ahora nuevos detalles y contó cómo se sintió.

 

 

La confesión surgió de una entrevista con el periodista Franco Torchia, en el marco del proyecto “Hablemos de todo” propulsado por el Gobierno. En la misma, la ex “Muñeca brava” se abrió como nunca y permitió inferir por sus dichos que el acosador fue el actor cubano de 51 años Jorge Perugorría.

QUIÉN ES PERUGORRÍA

 

El actor al que hizo alusión Oreiro es Jorge Perugorría Rodríguez. Nació el 13 de agosto de 1965 en La Habana y se lo conoce como “Pichi”. Además de su faceta actoral, el cubano es reconocido como director de documentales, escultor y pintor.

 

 

Tiene cuatro hijos (Anthuan, 28; Andros, 27; Adán, 21 y Amén, 17)con su mujer, la también actriz Elsa María Lafuente de la Paz. Participó de 41 películas y es uno de los actores cubanos con mayor proyección en el extranjero.

 

Es castrista y sigue viviendo en Cuba. “Fidel es un animal político. Es la figura más influyente del siglo XX en Latinoamérica. Nadie ha influido tanto en los cambios que han ocurrido en este continente”, resaltó en una reciente entrevista.

 

LA ESCENA EN LA QUE NATALIA FUE ACOSADA

 

 

LAS FRASES MÁS DESGARRADORAS DE NATALIA

 

“Una vez, trabajando en el exterior con un actor, se fue de copas y como que me quiso avanzar. Y al principio uno como que dice: ‘Bueno, tenemos que seguir trabajando juntos, ponete las pilas, no me interesa nada’, pero él se puso denso y lo tuve que parar físicamente,empujándolo muy fuerte. Y me fui del lugar donde estábamos”.

 

“Tuve que seguir trabajando con él  y, posteriormente a eso, en una escena que teníamos que hacer, pautamos la dinámica de la escena. Era una escena romántica y habíamos pautado que él me sacaba la camisa, yo abajo tenía un corpiño, y en el medio de la escena me lo arranca. Bueno, obviamente yo me puse muy mal pero él continuó con la escena”.

 

“Cuando terminó, me fui a hablar con el director y me pidió repetirla para no utilizar esa. En ese momento, lo que hice fue denunciar la situación al productor y después elevé una nota donde puse, no solamente que había sufrido este tipo de acoso, sino que también puse una parte de mi contrato en la que hablaba de eso. No puntualmente del acoso porque uno no lo prevé nunca. No podésponer en un contrato que si alguien te acosa, no debe de hacerlo. Es usos y costumbres. Pero sí, dentro del contrato, había unos ítems donde decía que yo podía decidir qué hacer con mi cuerpo, dónde exponerme y dónde no. Fue una idea mía”.

 

“Me generó mucha ansiedad, mucha angustia y baja autoestima. Me pidió disculpas y dijo que tenía problemas con el alcohol. Que lo que había hecho fue bajo los efectos del alcohol".

 

Aunque las acusaciones de Oreiro no son nuevas, el cubano jamás se refirió a la denuncia, ni de la presunto adicción al alcohol que le habría confesado a la actriz uruguaya.