
Luego de generar un tremendo revuelo en Twitter, donde le pidió a su ex pareja que le diga la verdad “a los suyos y a la sociedad”, Luciana Salazar (37) reapareció en la red social antes mencionada para confirmar y a su vez aclarar algunas versiones sobre su enojo con Martín Redrado (56).
Desde Miami, ciudad a la que viajó para recibir a Matilda, la hija que tendrá a partir de la subrogación de vientre, la mediática se refirió a los rumores que giran en torno a su descargo en las redes sociales por un supuesto plantazo que recibió de parte de su ex, con quien compartió los últimos siete años de su vida.
“Luciana se enojó con Martín porque le había prometido acompañarla a buscar a la beba y a último momento no fue”, escribió la cuenta de Twitter @lamascarada.
Ese mensaje fue compartido por Analía Franchín junto a la palabra “exacto” y rápidamente Luciana salió a aclarar los tantos.
“No, ¡no es sólo por eso Analía! Te contaron la historia incompleta. ¡Como siempre! Te diría que cambies de informante o que el protagonista sea honesto”, explicó la blonda en la red social del pajarito.
Pero eso no fue todo. Es que, minutos después de contestar ese mensaje, la ex novia del polémico economista agregó: “Como dudo que mi pedido sea cumplido, como tampoco lo fue por privado. Indudablemente tendré que bancarme este momento que me afecta pero con todas las energías puestas en que en pocos días este dolor no será en vano. Se viene lo mejor de mi vida”.
En tanto, Analía le respondió: “Lu, el mismo informante que desmentiste cuando asegure que venía un bebé en camino. Si no querés especulaciones, deja de jugar al Agente 86”.
Salazar aclaró: “Si el protagonista que te cuenta sólo la parte que le conviene. No soy tonta sé cómo opera”.
Mientras tanto, la panelista de El Diario de Mariana (El Trece, a las 14.30) Noe Antonelli dio otra versión del caso: “Me cuentan que ‘la historia completa’ es que Redrado es el padre de Matilda y tenía hasta el miércoles para contárselo a sus otros hijos, algo que aún no hizo. Vos me dirás @lulipop07 si estoy en lo cierto”.
Y al respecto dijo: “Mi donante es un estudiante de 26 años, que juega al fútbol americano -por lo que vi-, y con una familia que me hizo acordar mucho a la mía. Eso me gustó. Todos tienen ojos rasgados, como yo: ¡Mi hija será muy chinita! Pero lo que más me sedujo fue su sonrisa: enseguida la proyecté en la carita de Matilda”.
