Una gala exquisita y con muchos condimentos para resaltar, en lo que fue la fiesta de la industria musical internacional. Estuvieron los mejores de los mejores. Luces laser, melodías y mucho glamour decoró una nueva edición de la gala de los Premios Grammy. Las estrellas de la música se midieron y tuvieron sus recompensas tras una labor artística a lo largo del 2016. La ceremonia tuvo lugar en el Staples Center de Los Ángeles.  

En la animación de la misma, James Corden, el hombre detrás del exitoso "Carpool karaoke", tuvo su debut en la apertura con un rap dedicado a los nominados. Y un poco "accidentado", por la parodia que preparó para su entrada a escena, una perlita graciosa para romper el hielo al comienzo de la noche. Además sus graciosas intervenciones en pantalones cortos fue la nota de color.  

Entre los shows que sirvieron como momentos de distensión, se destacaron las performances de Katy Perry, Lady Gaga junto a Metallica -que fue muy explosiva-; Beyoncé (estando embarazada) y The Weeknd con Daft Punk, con un despliegue de efectos especiales y luces láser que resultaron cautivantes. Mientras que Adele, con su presentación de "Hello", corrigió los errores durante su intervención en la edición 2016 de los premios, pero tuvo un traspié en el tributo a George Michael y debió reiniciar su actuación mostrándose insegura y tensa. Pese a ello, terminó con lágrimas y aplaudida por todos. 

El primer premio televisado se lo llevó Chance the Rapper, quien ganó como Mejor Nuevo Artista y la misma Jennifer López fue quien se lo otorgó luego de enunciar un dulce discurso para el público presente: 'Esta noche celebramos nuestro lenguaje más universal: la música". Fue meritorio y emotivo el logro de David Bowie con cinco distinciones póstumas por "Blackstar" como mejor álbum de música alternativa, y mejor canción rock.  

También hubo expectativas desde Argentina, sobre todo por sus fans, de la participación de Diego Torres en el rubro álbum pop latino, pero no pudo ser, ya que Jesse & Joy se quedó con el título. Por otro lado, se esperaba por Illia Kuryaki & The Valderramas con el disco LHON en el rubro álbum de rock latino, que al cierre de esta edición fue uno de las últimas categorías en definirse. El duelo más esperado fue entre Beyoncé con su disco "Lemonade" y la británica Adele como su mayor competidora. La estadounidense se anotó el primer punto con el premio al 'Mejor álbum urbano contemporáneo. La ceremonia continuó hasta pasada la madrugada dejando el premio más importante de todos, 'mejor álbum del año' para el final.