El huracán Harvey, el de mayor fuerza que tocó territorio estadounidense en 12 años, dejó al menos tres muertos en Texas, donde el ciclón tocó tierra el viernes con unos vientos de hasta 215 kilómetros por hora.

 

Una persona falleció tras quedar atrapada en el incendio de su casa durante la tormenta en la región de Rockport, declaró a la prensa un alto responsable del condado de Aransas, en la costa texana, que también dio un balance de 12 heridos leves.

 

Y en Houston, una mujer se ahogó al salir de su coche en una zona inundada, indicó la prensa local citando a la policía. Las autoridades de esa ciudad pidieron a sus 2,3 millones de habitantes que permanecieran en sus casas.

 

En una rueda de prensa, el alcalde de Rockport, Charles "C.J." Wax, anunció que el ciclón se cobró a su primera víctima mortal, aunque rechazó dar detalles sobre la identidad del fallecido.

 

Rockport, una ciudad costera de casi 9.000 habitantes, amaneció desolada con calles convertidas en auténticos ríos, árboles derribados, señales de tráfico arrancadas, edificios derruidos y hasta barcos dados la vuelta por la fuerza del viento, según mostraron las televisiones locales.

 

En otras partes tras el paso de la tormenta, helicópteros de la Guardia Costera rescataron a 18 personas de lanchas y barcazas en apuros, dijo el capitán Tony Hahn, comandante del sector de Corpus Christi.

 

Varias embarcaciones se hundieron en el puerto de Corpus Christi, donde será necesario hacer mucho trabajo antes de que pueda ser reabierto. Como la ciudad es el tercer puerto petroquímico más grande de la nación, las autoridades también estarán alertas a derrames, señaló Hahn.

 

Unos 4.500 reos fueron evacuados de tres prisiones estatales en el condado de Brazoria, al sur de Houston, debido a que el caudal del cercano río Brazos estaba creciendo.

El meteoro más potente en golpear a Estados Unidos en más de una década tocó tierra el viernes por la noche a unos 48 kilómetros (30 millas) al noreste de Corpus Christi como un gigantesco huracán de categoría 4, con vientos de 209 kilómetros por hora (130 millas por hora).

 

Para el amanecer, casi 300.000 consumidores se habían quedado sin electricidad en la región costera, y en algunos lugares habían caído 500 milímetros (casi 20 pulgadas) de lluvia.

Para las primeras horas de la tarde, Harvey se había debilitado a tormenta tropical. Sus vientos sostenidos máximos habían disminuido a 113 kph (70 mph) y su vórtice se encontraba 97 kilómetros (60 millas) al sureste de San Antonio. Se desplazaba hacia el norte a 3 kph (2 mph), según el centro de huracanes.