El arzobispo Charles Scicluna, quien investiga en Chile acusaciones contra un obispo de encubrir abusos sexuales, fue sometido a una operación de urgencia de la que se recupera satisfactoriamente, por lo que su asistente lo reemplazó en las reuniones con testigos y víctimas del polémico caso.

Scicluna llegó el lunes a Santiago para sostener encuentros sobre señalamientos contra el obispo Juan Barros por ocultar presuntamente información de abusos a menores por parte de su mentor, el sacerdote Fernando Karadima. El médico tratante, Alonso Rioseco, detalló que se le realizó una cirugía para extirparle la vesícula. El portavoz de la Conferencia Episcopal, Jaime Coiro, explicó que el papa Francisco decidió que el proceso continúe a cargo de Jordi Bertomeu, un sacerdote español.