Señal de distensión. Delegaciones de las dos Corea mantuvieron una histórica reunión en su frontera en la que acordaron reanudar conversaciones militares.



Corea del Norte y Corea del Sur anunciaron ayer un acuerdo para resolver sus problemas mediante conversaciones militares para evitar un conflicto accidental, después de sostener su primer diálogo oficial en más de dos años, en momentos en que el programa de armas nucleares de Pyongyang alimenta las tensiones. Las dos Coreas no han logrado firmar la paz tras la guerra que los enfrentó y que dejó millones de muertos hace 65 años y en los dos últimos años las tensiones iban en aumento.

En un comunicado conjunto después de 11 horas de conversaciones, Corea del Norte se comprometió a enviar una gran delegación a los Juegos Olímpicos de Invierno de Pyeongchang, que se realizarán el próximo mes en Corea del Sur, pero hizo un "fuerte reclamo" después de que Seúl propusiera conversaciones para desnuclearizar la Península de Corea.

Corea del Sur pidió a su vecino que detenga los actos hostiles que generan tensión en la península y, a cambio, el Norte acordó garantizar la paz en la región, dijo el Ministerio de Unificación surcoreano en un comunicado. Las conversaciones han sido seguidas de cerca por líderes mundiales, en una clara señal de una reducción de las tensiones, en momentos en que aumentan los temores por el lanzamiento de misiles y el desarrollo de armas nucleares de Corea del Norte, que han significado un claro desafío a las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

Más temprano el martes, Seúl dijo que estaba dispuesto a levantar temporalmente algunas sanciones para que los funcionarios norcoreanos pudieran visitar Corea del Sur durante los Juegos. Pyongyang dijo que su delegación incluirá atletas, oficiales de alto rango, un grupo de porristas, reporteros y espectadores.

Corea del Sur ha prohibido unilateralmente la entrada de varios funcionarios norcoreanos en respuesta a las pruebas nucleares de Pyongyang, a pesar de la presión internacional. Sin embargo, algunos funcionarios surcoreanos han dicho que ven los Juegos como una posible oportunidad para aliviar las tensiones.

Próximamente se celebrarán conversaciones de trabajo para determinar los detalles sobre la llegada de norcoreanos a los Juegos Olímpicos, según el comunicado. El cronograma exacto se decidirá a través de diálogos documentados.