Donald Trump ingresó al pleno de la Knesset cinco minutos antes de las 13, hora local, y tras una ovación de más de tres minutos, pronunció su discurso en un clima de emoción, dentro y fuera del Parlamento. Hoy, después de 738 días ya no hay más secuestrados con vida en poder del grupo terrorista Hamas. Terminó la guerra en Gaza.

“Hoy los cielos están en calma, las armas callan, las sirenas se han apagado y el sol sale sobre una tierra santa que por fin está en paz”, afirmó el norteamericano. Y agregó: “Esta tierra y esta región, si Dios quiere, vivirá en paz por toda la eternidad.

El norteamericano recordó que nadie pensaba que iba a lograrlo. Que siempre lo atacaban marcando su estilo confrontativo. Sin embargo, afirmó, se consiguió el acuerdo. “¡Qué bien se siente decirlo, los 20 rehenes están de regreso!”.

El mandatario norteamericano remarcó que no solo buscaba el regreso de los rehenes, sino buscará mantener el acuerdo y hacerlo duradero. “Esto no es solo el final de una guerra, es el final de una era de terror y el comienzo de una era de fe y esperanza, y de Dios. Es el comienzo de una gran concordia y una armonía duradera para todas las naciones de lo que pronto será una región verdaderamente magnífica. Lo creo firmemente. Este es el amanecer histórico de un nuevo Medio Oriente”.

Para Trump, “a medida que el polvo se asienta, el humo se disipa, los escombros se retiran y las cenizas se limpian del aire, amanece en una región transformada y un futuro hermoso y mucho más brillante aparece de repente al alcance. Este es un momento muy emocionante para Israel y para todo Oriente Medio, porque en toda la región, las fuerzas del caos, el terror y la ruina que la han asolado durante décadas se encuentran ahora debilitadas, aisladas y totalmente derrotadas”.

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Donald Trump en el Parlamento israelí.-

Y casi con tono de promesa dijo: “Está surgiendo una nueva coalición de naciones orgullosas y responsables. Y gracias a nosotros, los enemigos de toda civilización están en retirada”.

“Desde el 7 de octubre hasta esta semana, Israel ha sido una nación en guerra, soportando cargas que solo un pueblo orgulloso y fiel podría soportar. Fue un período muy difícil. Para tantas familias de todo el país, han pasado años desde que conocieron un solo día de verdadera paz. Pero ahora, por fin, no solo para los israelíes, sino también para los palestinos y para muchos otros, la larga y dolorosa pesadilla ha terminado por fin”.

Netanyahu, minutos antes del dursurso de Trump, enumeró los principales hitos de la cooperación entre ambos países. Agradeció a Trump por el reconocimiento de la soberanía israelí sobre los Altos del Golán, por su postura firme en la ONU frente a las acusaciones contra Israel y por el respaldo a los derechos israelíes en Cisjordania considerados por el primer ministro como la patria ancestral del pueblo judío. También resaltó la mediación estadounidense en los Acuerdos de Abraham, que abrieron la puerta a la normalización de relaciones con varios países árabes, y la decisión de retirar a Estados Unidos del acuerdo nuclear con Irán, calificado por Netanyahu como “desastroso”.

Además de Trump y del premier israelí, habló el líder de la oposición Yair Lapid. “Señor presidente, usted ha salvado las vidas de nuestros rehenes. Pero ha salvado mucho más. Ha salvado las almas de los afligidos cuyos seres queridos ahora serán llevados a casa para ser enterrados. Ha salvado a miles de soldados que ahora no caerán en combate. Y ha salvado a millones de personas de los horrores de la guerra. Ha salvado más de una vida, y cada vida es un mundo entero”, afirmó.