Treinta y dos minutos (se paró varias veces por invasión de los hinchas locales). Cuarenta y dos penales. Cuarenta y uno acertados y sólo el penúltimo, el de Juan Ruiz, marrado. Varios preinfartos. Y cientos de súplicas, dedicadas a alguien en particular según la creencia de cada uno. Una definición por penales infartante que derivó en la eliminación de Alianza tras el 21-20 con que General Paz Juniors se adjudicó la llave. No es la más larga en penales ejecutados, aunque sí la de mayor cantidad de goles. En lo extensa ingresó al podio pues es la tercera en el libro imaginario de los Guinness del fútbol. Aunque la noche, para el hincha Lechuzo sólo representó una gran amargura. Justo un par de horas después que por el mismo torneo, Trinidad y Unión debieran ejecutar 30 penas máximas para determinar que el Azul accedió a la rueda siguiente.
A medida que los remates se iban multiplicando, la pregunta de ¿cuál es la definición más larga? comenzó a ganar terreno en el estadio. Con el desenlace en favor de los cordobeses y luego de la hiper definición, se determinó que quedó como la tercera más larga. La que mantiene el récord es la que se produjo por la Copa Namibia el 23 de enero del 2005. Los rivales de ocasión fueron el KK Palace y el Civics, que como Alianza terminó perdiendo. Fue 17-16 para los primeros, pero la eficacia no fue tanto como anoche en Santa Lucía pues ésos equipos remataron 48 penales. La de Alianza-Paz Juniors tampoco es la más larga en la historia del país ya que es superada por la que ocurrió entre Argentinos y Racing el 20 de noviembre de 1988, cuando la AFA impuso la modalidad que en ese torneo siempre hubiera un ganador y así en caso del partido culminar empatado, se definía por penales. Esa tarde en Caballito, donde el Bicho hizo de local, se dispararon 44 remates desde los once metros (duró 45′ la definición) y el triunfo se quedó para los de La Paternal por 20 a 19. El arquero Carlos Goyén fue el héroe tras contenerle el remate al Panza Videla.
Lo de anoche fue para el infarto. Con los arqueros revolcándose casi siempre a los costados erróneos, pero que paradójicamente uno de ellos, De Tobillas, sentenció la historia para los de la Docta. Esta vez el Tato González, más allá que anotó dos penales, no fue el héroe y así la noche de Alianza terminó con una gran decepción por haber estado tan cerca de sacar el boleto.
