El ministerio de Salud intensifica la vigilancia epidemiológica y sigue con atención el reciente brote de dengue en Paraguay, con más de 50 casos en el departamento de Concepción, a 500 kilómetros de Asunción, afirmó ayer el ministro Juan Manzur durante una rueda de prensa.

"Estamos extremadamente atentos a un brote importante de más de 50 casos de dengue en Concepción, casi frontera con Brasil, e intensificamos la vigilancia epidemiológica", dijo el ministro Juan Manzur en una rueda de prensa.

No obstante, las autoridades sanitarias informaron que "hasta la fecha, no tenemos diagnósticos de dengue ni circulación viral" reportada.

De la reunión participó también el vice ministro Fernando Avellaneda junto a Sergio Sosa Stani, director nacional de Vectores; Horacio Echenique, director de Epidemiología, y Gabriel Yedlín, a cargo del Plan Nacional del Dengue.

La zona en la que se confirmó el brote de dengue es la comunidad rural de Puenteziño, en la localidad de José Félix López, departamento paraguayo de Concepción.

Manzur precisó que durante "la migración de personas que vendrán a la Argentina para las fiestas desde el sur de Brasil, Paraguay y otros lugares en los que hubo registro de casos, se difundirá que aquellos que presenten síntomas compatibles con la enfermedad concurran a la consulta tempranamente para hacer un bloqueo del foco, y curarse".

El dengue es una enfermedad autolimitada y benigna en términos generales, que sin embargo puede presentarse en su forma grave. Para evitar muertes -causadas por lesiones en vasos sanguíneos que permiten escape de líquidos, con síntoma de dolores abdominales intensos que suelen manifestarse cuando la fiebre baja- "es importante hacer la consulta precoz para detectar a tiempo las forma graves" de dengue, dijo Sosa Stani.

Respecto al dengue en condiciones de inundación, como las que ocurren en Chaco y Concordia, el funcionario dijo que se hace vigilancia "de casos febriles y también de patologías relacionadas con emergencias hídricas, como dermatitis y conjuntivitis, además de saneamiento ambiental por roedores" transmisores de leishmaniasis.

"Lograr tener menos criaderos" de Aedes aegypti (el mosquito transmisor del dengue) es la consigna principal que persigue eliminar la posibilidad de que el mosquito acceda al agua para depositar larvas.

Yedlín indicó que la vigilancia epidemiológica consiste en que todo el sistema de salud tiene obligación de reportar los casos clínicos de síndrome febril inespecífico, fiebre mayor de 38 grados que no tenga síntomas respiratorios, dolor detrás de los ojos y muscular, y falta de hambre.

"La dispersión de insecticida -vulgarmente conocida como fumigación- se utiliza únicamente en momentos adecuados para bloquear focos y tiene impacto sobre el mosquito durante cuatro horas; pero si no se eliminan criaderos, tres días después del rociado vuelven a nacer" nuevos insectos, enfatizó.

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Yedlín indicó que la vigilancia epidemiológica consiste en que todo el sistema de salud tiene obligación de reportar a través de "planillas C2" los casos clínicos de síndrome febril inespecífico, fiebre mayor de 38 grados que no tenga síntomas respiratorios, dolor detrás de los ojos y muscular, y falta de hambre.

"La dispersión de insecticida -vulgarmente conocida como fumigación- se utiliza únicamente en momentos adecuados para bloquear focos y tiene impacto sobre el mosquito durante cuatro horas; pero si no se eliminan criaderos, tres días después del rociado vuelven a nacer" nuevos insectos, enfatizó.