Buenos Aires, 26 de octubre.- La reunión tendrá lugar por la tarde en la sede de la Cancillería, donde el diplomático del país vecino será recibido por el secretario de Comercio y Relaciones Económicas Internacionales, Alfredo Chiaradía.

El encuentro tiene lugar luego de que el gobierno de Luiz
Inacio Lula Da Silva habilitara al Ministerio de Desarrollo a aplicar
medidas "espejo" respecto de las licencias no automáticas que usa
Argentina para contener los productos de su país.

Duramente cuestionadas por los brasileños, las licencias no
automáticas probaron ser una herramienta eficaz para contener
productos excedentes en el mercado brasileño, afectado por la crisis de la primera mitad del año.

Los brasileños se quejan, sobre todo, de que los bloqueos al
mercado de sus productos están siendo aprovechados por los países
asiáticos que los están desplazando a un segundo lugar.

La semana pasada se conoció que el principal socio del
Mercosur comenzó entonces a pagar con la misma moneda a los argentinos demorando licencias para ingresar a ese país que antes no tardaban más de 48 horas.

Analistas sostienen que la estrategia brasileña es forzar de
ese modo a la Argentina a negociar el levantamiento de las
restricciones.

El tema fue analizado hace un mes en San Pablo entre la
ministra de la Producción, Débora Giorgi, y su par de Desarrollo, Miguel Jorge.

Allí la delegación argentina le observó a los brasileños que
de haber existido un mecanismo institucional en la región que
contemplara desbalances de comercio como el actual, la coyuntura se
podría resolver de diferente modo.

Ese dispositivo propuesto en 2004 por Argentina fue el
Mecanismo de Adaptación Competitiva (MAC), que luego de largas demoras fue rechazado por el Congreso de Brasil, una cuestión que pasó desapercibida.

Al no haber disponibles formas legales en el bloque que
contemplen controles a los flujos, el gobierno argentino optó por las
licencias habilitadas por la Organización Mundial del Comercio
(OMC).

Como es usual en Mercosur, donde muchos problemas se resuelven
con voluntad política, Giorgi y Jorge idearon un sistema de
consulta permanente para actuar en caso de que las licencias no
automáticas se demoraran mas de la cuenta.

Las señales indican que se mantiene una discusión de fondo con
Brasil que comenzó en 2004 cuando el entonces presidente Néstor
Kirchner reintrodujo en la cumbre de Ouro Preto la idea de que el
comercio en la zona no puede ser absolutamente libre.

En ese marco, el canciller Jorge Taiana se mostró este
mediodía "preocupado por la interrupción del flujo comercial con Brasil, ya que varios camiones con productos perecederos argentinos están siendo demorados en las diferentes fronteras con el país vecino
sin aviso previo".