Siempre hay una primera vez y para Pablo Borches parece que llegó. El juvenil defensor que se hizo en Sportivo tiene una luz de ventaja sobre el resto de los postulantes para cubrir la baja de Mauro Palomeque en la defensa de Desamparados para el clásico de mañana frente a Deportivo Maipú en Mendoza. Borches, uno de los pilares de la campaña local, fue la primera elección del técnico Luis Recúpero por encima de Oscar Saiz y de Martín Presioza. Borches ya había integrado el plantel del Argentino A e incluso había estado en el banco de suplentes pero nunca jugó y todo indica que tendrá bautismo de fuego en una cancha que no es para cualquiera. El trabajo silencioso de Pablo dio sus frutos y Recúpero, que lo dirigió en el torneo local, apostó a su potencia física para rearmar la última línea, sabiendo que en Maipú habrá mucho centro y que en los centrales estará gran parte de la clave del partido.
"Pablo tendrá su chance y confío en lo que puede hacer. Maduró bastante en la temporada y se ubicó por encima del pibito Saiz, un jugador de enormes condiciones pero que aún es muy joven como para ir de entrada. Borches sabe que puede rendirle al equipo y confío muchísimo en lo que puede aportar. Es su gran chance y la tiene que aprovechar. Es el momento de los pibes del club y algún día tienen que jugar", justificó Recúpero poco después de la práctica que terminó de definir la formación puyutana.
EL EQUIPO
Sin Palomeque, suspendido por la acumulación de amarillas, en la formación ante Maipú quedó sólo una vacante y se la terminó quedando Pablo Borches, siendo ese el único cambio respecto del equipo que viene de vencer a Estudiantes de Río Cuarto. El resto de la alineación no sufrirá modificaciones porque la apuesta de Recúpero fue a una base que sólo se toca por razones de fuerza mayor.
En la práctica vespertina de ayer, realizada en el camping El Paraíso, los titulares se movieron con Luis Mingolla en el arco; Lucas Ceballos, Borches, Juan Sosa y Omar Díaz fueron los defensores; en el mediocampo, Hernán Lamberti, Emanuel Campo, Matías Garrido y Adrián Benito se volvieron a repetir, mientras que en el ataque la dupla también volvió a ser la misma: Marcos Quiroga-Gonzalo Parisi. Como se ve, muy pocos misterios y una ratificación de que éste es el equipo y que la idea es una sola: ganar confianza.
Recúpero, durante el ensayo, insistió muchísimo en el orden para recuperar y para salir de contra y además, remarcó muchos movimientos con pelota detenida sabiendo que ese es uno de los puntos fuertes de la formación mendocina.
Hoy será tiempo de entrenamiento táctico con trabajo especial en pelota parada, tanto a favor como en contra.
