Las imágenes son interminables. La maraña fotográfica es intrincada. El internauta pude perderse en los albums de fotos de sus amigos, de los amigos de sus amigos, y de los que aún no son sus amigos. Asi es Facebook, la red social de Internet más grande, con millones y millones de usuarios en el mundo, que intercambian y comparten todo.
Esta semana esta comunidad virtual también llamó la atención sobre un hecho. Con asombrosa inmediatez apareció el martes en el "muro" -como se le llama al espacio en el cada usuario actualiza sus noticias y las comparte- de un "facebokero" sanjuanino la imagen de un perro tendido al lado de una farola y un charco de agua. Asi se difundió el primero y uno de los pocos registros de imagen del hecho que desencadenó una serie de acontecimientos que terminó con la clausura por varias horas del Parque de Mayo.
La foto de un perro muerto, en un espacio como Facebook, dedicado generalmente a las cuestiones sociales, a la promoción de eventos y en menor medida a la denuncia, al menos por estas latitudes, funciona como indicador los usuarios de Internet utilizan la red como una herramienta poderosa y efectiva para comunicar.
En las primeras horas del miércoles, la noticia se esparció por la red. DIARIO DE CUYO recibió de un lector las fotos del momento en que el perro era retirado del Parque. La gente parecía conmocionada ante la inminencia de una noticia aún más trágica: que el dueño del perro hubiese sido la víctima. O cualquiera de las miles de personas que a diario transitan por este espacio verde.
DIARIO DE CUYO on line también fue la caja de resonancia de los lectores preocupados el mantenimiento del Parque de Mayo.
Esta vez fue un perro, tal vez mañana sea un niño o, una de las tantas personas que por allí circulan. la pregunta donde están los disyuntores?", se quejó Mabel.
Para Juan Pablo el reclamo es claro: "Menos mal que fue un perro y no una persona, pero igual tuvo que suceder una muerte para que se hagan los controles necesarios"
Pero los lectores también se ocuparon de los vendedores ambulantes, los primeros responsables según la Dirección de Arquitectura, de la " destrucción de la instalación eléctrica de las farolas del parque.
"Lo de los vendedores ambulantes es un abuso, nos privan de los espacios por los que deberíamos circular libre y tranquilamente, como debe ser en un lugar de esparcimiento, y nos exponen a todos, ellos incluídos, a un accidente", escribió en la web Mauricio.
Incluso una pedido nostálgico llegado desde Buenos Aires, Omar, un sanjuanino que añora el parue de Mayo y pide que se mantenga "ese lugar tan importante para que las familias reposen después de un dia laboral cansador".
Quedó evidenciado una vez más que la apropiación de la red que hace el usuario de Internet es cada vez más profunda. A veces sólo como modo de esparcimiento, de contacto social y otras, como en este caso, como un medio para alertar a la población sobre un hecho.