Tiene 35 años y más de 20 de trayectoria en cine, teatro y televisión. Sus interpretaciones son elogiadas por sus pares y la crítica (recibió un ACE como mejor actriz de reparto en comedia dramática en 2005). El público la prefiere haciendo de "mala" (en ese tren compuso a Rita en Son de Fierro, que mató al profesor ciego que interpretaba Mariano Martínez), pero su vidriera actoral expone su talento para construir con solidez cualquier desafío. Con proyectos de cine y teatro para el 2010, disfruta su espléndido presente en Valientes, la tira-tanque de El Trece. Allí le da vida a Juana Gómez Acuña, la malvada que desespera por el amor de Leo (Luciano Castro) y arremete contra su archienemiga Alma (Julieta Díaz). Mamá, esposa y actriz, esta mujer que de jovencita estaba "enamorada" de Arnaldo André, su padre en la ficción ("cuando se lo dije se mató de la risa", confiesa) se asume visceral para todo y con bajo perfil. Y en ese tono dialogó con DIARIO DE CUYO.
– Estuviste de gira teatral por España hace años. ¿Tentó la idea de proyectarte en el exterior?
– Tuve la tentación cuando era más jovencita, pero después se me fueron las ganas. Me acuerdo que mi hija Miranda tenía 8 meses…
– ¿Por ella diste un paso al costado?
– Por varios motivos, porque cada vez me iba mejor acá. Armé mi familia y empezó como a desaparecer esa necesidad.
– ¿Qué aportó la llegada de Miranda?
– Fue un antes y un después. Me cambió las prioridades, los valores, porque antes todo estaba focalizado en mí. Por ejemplo a la noche, antes de dormirme, organizo su día. Y esas cosas cotidianas son las que te llevan a cambiar el orden de importancia.
– Con horarios de grabación agotadores ¿Cómo te las arreglas?
– Cuando hago teatro lo más complicado son los ensayos, pero me relajo cuando empiezan las funciones. Las tiras siempre me dan miedo, pero tengo una señora que me ayuda y eso me tranquiliza. Tener apoyo es fundamental.
– ¿Tu marido te ayuda?
– Muchísimo, es fundamental en mi vida porque me acompaña no sólo en la crianza de Miranda. Es como mi cable a tierra. Él no es del medio y eso está bueno.
– Hablemos de Juana ¿incomprendida o villana?
– ¡Totalmente incomprendida, es una víctima!. Hace maldades, pero porque está desequilibrada. No la quiero justificar, pero todos la usan para su beneficio, su padre, Leo… y ella la pasa muy mal también.
– Y Eleonora, salvando las distancias ¿Tiene algo de Juana?
– (Risas) ¡No!, no me reconozco ni en su historia, ni en su forma de actuar y eso es lo que me interesó cuando me propusieron el personaje.
– ¿Defenderías un amor como lo hace tu personaje?
– (risas) Definitivamente no.
– Y fuera del plató, en lo cotidiano ¿Qué situaciones te enloquecen?
– No me banco las mentiras. Tampoco la injusticia, me indigna y saca lo peor de mí.
– Y cuando sucede eso ¿Reaccionás a lo Juana o como Alma?
-(Risas) A lo Eleonora, super explosiva y frontal. Soy impulsiva y para nada rencorosa. No soy de buscar el momento para vengarme, para nada. Por ahí digo cosas hirientes sin darme cuenta, pero prefiero decir mi verdad.
– Y en ese tren de honestidad ¿Cómo te llevás con Díaz y Kloosterboer?
– Muy bien a pesar de ser las tres diferentes. De hecho salimos a almorzar juntas y cuando podemos nos juntamos.
– ¿Reina la paz también con Luciano, Mariano y Gonzalo?
– Sí, nos llevamos muy bien. Está bueno conocerse y respetarse, porque uno aprende mucho de sus compañeros.
– ¿Por qué pensás que a la gente le gustan "los malos" en las novelas?
– Yo creo que tiene que ver con el grado de oscuridad del personaje. En algún lugar, a veces, muestran partes nuestras que no salen a la luz comúnmente. Pero más allá de mi interpretación, creo que el público hace una especie de catarsis con los malos.
– ¿Pudiste ver la parodia de Valientes, en Showmatch?
– No, pero me contó mi mamá que es divertida. Está todo bien de mi parte, si la gente se divierte, todo bien.
– Valientes supera en rating a Tinelli ¿Estás pendiente del minuto a minuto?
– Trato de ocuparme de mi personaje y no de eso, porque me saca mucha energía. Pero no voy a negar que todos dependemos del rating. Si la novela no funciona, nos quedamos sin trabajo, modifica el ánimo y los proyectos. Pero ocurre todo lo contrario cuando vivís un éxito cómo Valientes.
– ¿Te desvela tener un protagónico?
– Para nada, porque te puede tocar un protagónico con una historia poco interesante. Me interesa más componer un buen personaje y seguir creciendo con historias cada vez más grandes y jugadas en lo actoral.
– Si te propusieran un protagónico y tuvieras que elegir entre Luciano, Mariano y Gonzalo ¿Cuál sería?
– Te voy a decir la verdad, posta. Me llevo muy bien con los tres, de hecho ya trabajé con Mariano en Son de Fierro, pero creo que el que más pega conmigo es Gonzalo. Me da la sensación que haríamos una buena dupla.
– ¿Qué tiene Gonzalo que no tienen los otros?
– (Risas) Es impulsivo y temperamental como yo para actuar, y con eso alcanza.