Apareció con cara de desesperado diciendo que dos ladrones lo asaltaron en una finca de Sarmiento y, como no pudieron robar nada, lo trajeron con vendas en los ojos y secuestrado en la camioneta de la empresa. También dijo que dieron vueltas durante 3 horas y al final lo dejaron en un sitio oscuro de Carpintería. Su historia primero parecía creíble, de hecho encontraron el vehículo abandonado en otro lugar. Lo curioso es que no tenía ni un rasguño, llevaba aún su celular, no faltaba nada en la camioneta y, además, lo habrían visto abandonar la finca sin avisar. Fue así que empezó a desmoronarse su versión hasta que el obrero rural confesó que inventó todo para justificar la ausencia en su trabajo, por lo que lo metieron preso por falsa denuncia.
Lo que más molestó es que la mentira de Jorge Emanuel Sánchez (28) movilizó patrullas y policías de Sarmiento, Pocito, de la División Tránsito, del Comando y la sección Robos y Hurtos de la Brigada, que salieron a buscar en vano ayer en la madrugada a esos ladrones que no existían.
El propio Sánchez llamó por celular al 911, pasadas las 3.30 de la madrugada de ayer, pidiendo ayuda y asegurando que unos ladrones que lo asaltaron lo dejaron en Carpintería. Más tarde, unos policías lo encontraron cerca del Bº Municipal. La Policía señaló que ahí contó la increíble novela sobre dos ladrones que entraron a robar a la finca Olivares de la Asequiom (donde él trabaja), en la localidad sarmientina de San Carlos, y que de ahí lo trajeron amenazado dentro de la Chevrolet S-10 de sus patrones para luego abandonarlo en ese lugar. La camioneta apareció a 2 kilómetros de donde él fue localizado. Los policías de Robos y Hurtos, a cargo del comisario Carlos Castillo, vieron que el muchacho se contradecía constantemente, además nada encajaba. Lo llenaron de preguntas hasta que Sánchez se quebró y dijo llorando que todo fue un invento. Según un jefe policial, al parecer, salió a divertirse en la camioneta y como se le hizo tarde no supo cómo justificarse.