Uno, el argentino José Martinazzo, está obsesionado en armar un grupo que luche por el título en el Mundial de Vigo. El otro, el chileno Mauricio Llera, sólo piensa en mejorar en tierras españolas el decimoprimer lugar del último Mundial. Los dos sacaron muchas cosas de este desafío de tres partidos. Aunque ambos confirmaron que todavía les falta incluir a los jugadores que todavía no regresan de Europa. El menor de los Martinazzo fue claro: “Tal como pensaba, estos partidos vinieron bárbaro. A los jugadores les sirvió para sumar minutos en cancha y también para integrarse. A mí para seguir evaluando las posibilidades de cada uno. Y las dos cosas se cumplieron. Especialmente en lo mío, porque me demostraron que cada uno lucha por ganarse un lugar. Y esa competencia sana le hace bien al grupo. Ellos saben que todavía no se integran muchachos que están en un muy buen nivel. Pero igual se la juegan y no pierden sus ilusiones”. José, más adelante, aclaró que “éstos chicos me demostraron que están capacitados para hacer el hockey que a mí me gusta. Ese con juego veloz, de ataque. Que puede meterle presión y aniquilar a cualquier rival. Nada que ver con movimientos esquematizados. A éstos chicos hay que darles libertad, porque todos tienen grandes condiciones. Y no estoy descubriendo nada. Ese fue, es y será el hockey argentino”. El técnico argentino, pensando en Vigo, cerró: “Este Mundial será durísimo. España, Portugal y otros más están bien afilados. Pero nosotros la vamos a luchar a muerte. Nadie nos puede quitar la ilusión del título. Quiero armar un grupo homogéneo que respete la filosofía del hockey argentino”. Mauricio Llera, por su parte, aclaró “éstos partidos con Argentina me demostraron que todavía estamos lejos físicamente. A mí me importaba saber dónde estamos y no tengo dudas que nos falta mucho. Estos chicos deben saber asumir mayores responsabilidades en cada partido”. Mauricio agregó que “todavía falta que se sumen jugadores importantes, como Gonzalo Andrade, Nicolás Fernández y Armando Quintanilla, pero ésta es la base. No nos queda mucho tiempo pero vamos a trabajar duro para tratar de llegar lo que mejor podamos”. Sobre el Mundial que se viene, dijo: “Nos tocó un grupo demasiado fuerte. Con Portugal y Argentina como grandes favoritos. Yo sólo quiero mejorar el 11er lugar en el que Chile terminó en el último Mundial (el de Suiza, en el 2007). Y si podemos terminar novenos, todo fantástico”.
