Italia, 19 de septiembre.- El Papa Francisco, nuevamente, habló de la comunidad homosexual y en esta oportunidad aseguró que no puede "interferir espiritualmente" en la vida de los gays y lesbianas y apoyó el discurso que dio el pasado julio cuando aseguró que no era quién para juzgarlos.

En una entrevista que cita CNN el Papa también reveló que la mujer debe jugar un papel fundamental para las decisiones de la Iglesia y rechazó las críticas que le piden que se muestre en contra del aborto y el matrimonio igualitario.

La entrevista, que fue lanzada por revistas jesuitas en 16 diferentes idiomas, ofrece la vista de Francisco en relación a la Iglesia: "La gente de Dios quiere pastores y no clérigos que actúen como burócratas o gobiernos".

La entrevista, realizada por La Civilta Cattolica, un periódico con base en Roma, comenzó con una pregunta en relación a su pasado: "¿Quién es Jorge Mario Bergoglio?". "Soy un pecador. Esa es la definición más certera", aseguró.

Por otra parte, se mostró humano, comentó que rezó en el dentista mientras esperó para ingresar y que se sintió atrapado con el lugar donde vivieron todos los papas. Por ese motivo se mudó a un lugar más pequeño.

En relación a la homosexualidad explicó que recibió muchas cartas de gays y lesbianas que aseguran que están heridos por la actitud de la Iglesia, pero explicó que "la Iglesia no quiere hacer eso". Se preguntó nuevamente quién es él para juzgarlos y explicó que, diciendo esto, cita lo que dice el catecismo ya que si bien los condena, también asegura que "deben ser aceptados con respeto, compasión y sensibilidad".