Finalmente, tras sucesivos pedidos gremiales que vienen desde fines del año pasado, el Gobierno llamará a los gremios que representan a los estatales provinciales -salvo docentes, que ya están charlando en paritarias- para negociar un nuevo aumento salarial. Según dijo ayer el ministro de Gobierno, Emilio Fernández, la convocatoria será "sobre fin de mes o principios del mes que viene". Mientras el funcionario evitó dar precisiones sobre el ofrecimiento que puede hacerse, algunos gremios dijeron que reclaman entre un 15 y un 25 por ciento de aumento, en base a sus registros de impacto de la inflación en un año. Esto, porque la última recomposición fue en marzo de 2009, en el orden del 9 por ciento, lo que significó unos 120 pesos de bolsillos para el grueso de los trabajadores que son unos 15 mil (los docentes son unos 16 mil más).

Los convocados serán los gremios no docentes que se reúnen con la parte oficial -representada por los ministros Fernández y Aldo Molina (Hacienda)- en dos grupos por tener sistemas salariales muy distintos. Uno que integran ATE, UPCN, ATSA, SOEME y Sitraviap y otro que componen la Intersindical de la Salud y el Sindicato Médico.

"Nosotros no vamos a hacer ningún tipo de especulaciones respecto de las cifras, queremos tener las cosas claras en el ámbito de la administración y, una vez que esté, llamaremos a los gremios a discutir", dijo Fernández, sin dar detalles. Tampoco dijo si piensan dar una suma fija o un porcentaje.

Tres gremios consultados por este diario coincidieron en que "ya era hora" de que se los convoque, en virtud de los sucesivos reclamos.

En cuanto a qué se pedirá, Hugo Leglise desde ATE dijo que "no planteamos porcentajes ni sumas fijas porque queremos que en el momento en que se convoque se vea cómo está nuestra situación. Hay tiempos para discutir y tiempos para ejecutar y lo que se habla ahora queda desactualizado a la semana".

En cambio, el titular de UPCN, José Villa, habló de sumas específicas: "pedimos un 25 por ciento. El año pasado pedíamos el 6 ó 7 pero ya subieron las cosas, la inflación seguro supera el 20 por ciento". Esto, según el gremialista, son al menos 180 pesos de bolsillo para cada estatal.

Alfredo Duarte, de ATSA, dijo que esperan un aumento "entre un 15 y un 20 por ciento a los básicos de nuestra ley", precisando que de bolsillo eso significa al menos 250 pesos para cada trabajador. Este gremio se reunió con Fernández la semana pasada y pidió, además, que pasantes y jefes de hogar se incorporen a planta permanente, que se equipare el salario familiar local con el nacional (es más alto) y el 82 por ciento móvil de jubilación.

El ministro Fernández también anticipó que como ha sucedido en años anteriores, una vez fijado el aumento para los provinciales, habrá una ayuda para que los intendentes puedan conceder una recomposición a los municipales.