Cuatro meses después de que un tribunal les concediera la excarcelación y luego de un año de estar presos en el Penal de Chimbas, cuatro de los cinco implicados del resonante y millonario megafraude con casas del IPV cometido contra unas 200 familias entre marzo de 2009 y abril del año pasado, salieron de la cárcel y volvieron a sus casas. Fue así porque recién el jueves el juez de Instrucción José Atenágoras Vega, consideró que habían acreditado los 200.000 pesos de fianza que cada uno debía rendir para poder salir, dijeron fuentes judiciales. El único que seguirá preso hasta el día del juicio es Carlos Albornoz, supuesto cabecilla de la maniobra y mentor del Movimiento Agropecuario Provincial, la pantalla usada para que la gente creyera que existía un convenio con el IPV para obtener una vivienda que nunca consiguieron y por la cual los acusados llegaron a recaudar, se estima, alrededor de 2 millones de pesos.

Los excarcelados son Pedro Roldán, Alejandra Dragui, Marcos Barragán y su madre Myriam Quiroga. Casi todos ofrecieron viviendas para cubrir el monto de la fianza y Quiroga completó esa suma ofreciendo un auto de un pariente, dijeron fuentes judiciales.