Los cítricos como la naranja, limón, mandarina, pomelo y otros. nos brindan sus frutos en la estación más fría. Tenerlos en el jardín de casa es un verdadero placer, primero porque en octubre nos dan su floración exquisita, el azahar y segundo porque los frutos de casa o de la quinta pareciera que tienen otro sabor a los comprados. La propuesta es conocer acerca de estas plantas que aparte de ser ornamentales en el jardín, junto a la sección Sabores de hoy puedas verdaderamente sacarle el jugo.
Los cítricos en general son considerados plantas tropicales y subtropicales. La mayoría presenta un grado bastante amplio de adaptación a zonas que difieren en temperatura, sin embargo, esas diferencias ejercen una influencia apreciable sobre determinados aspectos del árbol. Respecto a las temperaturas extremas que pueden soportar, puede resistir, sin daños apreciables, temperaturas de hasta -2ºC de mínima y hasta 50ºC de máxima, en condiciones favorables de humedad del suelo y temperatura del viento. Pero todo ello depende de varios factores propios de cada árbol: edad, salud, estado nutricional del árbol, etc. La temperatura óptima de desarrollo y producción se sitúa entre los 23º y 24ºC. Respecto a las condiciones del suelo es posible encontrar plantaciones en condiciones normales en una gran variedad de suelos, aunque su desarrollo y productividad están en estrecha relación con la calidad del suelo en que se encuentran. Los suelos deben reunir algunas características para no tener limitaciones, como un drenaje adecuado que evite la salinización del suelo, un contenido en materia orgánica (humus), una acidez determinada (pH entre 6,2 y 6,8) que facilite la absorción de nutrientes.
En general estos árboles presentan características muy ornamentales, de modo tal que son muy utilizados en el paisajismo actual.
El Mandarino
Los mandarinos son arbustos o árboles pequeños, de 2-4 m de altura. Son plantas de notable efecto ornamental, tanto aislados en jardines y patios, como formando bosquetes o setos. Por su vigor reducido, son también propios para plantar en macetas. De modo tal que son especies muy utilizadas en jardinería. El mandarino pertenece a la familia de las Rutáceas (Rutaceae). Existen varias especies de mandarinas: Citrus reticulata, Citrus deliciosa, Citrus unshiu, Citrus reshni (clementinas, satsumas y comunes).
Su origen es en China e Indochina. Es de porte menor que el naranjo, más redondeado.
Sus hojas son algo más estrechas y alargadas que las del naranjo, con alas rudimentarias.
Las flores, solas o en grupos de 3 ó 4.
El fruto, Hesperidio, la mandarina poseen muchas variedades muy semilladas y otras que no tienen semillas.
Otras consideraciones
Es más resistente al frío que el naranjo, pero los frutos son sensibles. También es más tolerante a la sequía. La recolección es temprana.
Se deben plantar respetando las medidas, generalmente entre los 6 x 6 m. y para los mandarinos más pequeños se aplican marcos de 4,5 x 4,5 m. Demandan mucho abono (macro y micronutrientes), es una planta que frecuentemente sufre deficiencias, destacando la carencia de magnesio, que está muy relacionada con el exceso de potasio y calcio y que se soluciona con aplicaciones foliares. Otra carencia frecuente es la de zinc, que se soluciona aplicando sulfato de zinc al 1 %. El déficit en hierro está ligado a los suelos calizos. El abonado debe realizarse al inicio de la segunda brotación desde la plantación. Se abonará en cada riego, teniendo la precaución de no sobrepasar los 2 kilos de abono por metros cúbicos de agua de riego para evitar un exceso de salinidad. Sólo se indica el abonado en los 4 primeros años ya que posteriormente es aconsejable un asesoramiento técnico especializado que tenga en cuenta diversos factores como porte, producción esperada, variedad, pie, etc. Hay especies que demandan grandes aportes de agua (9.000-12.000 m3/Ha). En parcelas pequeñas se aplicaba el riego por inundación, aunque hoy día la tendencia es emplear el riego localizado y el riego por aspersión en grandes extensiones de zonas frías, ya que supone una protección contra las heladas. Manejando el riego se pueden provocar floraciones en fechas adecuadas.
La poda es más frecuente que en naranjo. Es una especie que puede ser muy productiva, por lo que es frecuente la ruptura de ramas y suelen instalarse estructuras de soporte. Es necesaria una poda anual con objeto de eliminar las ramas muertas, débiles o enfermas y vigorizar el resto de la vegetación. Presenta una caída precosecha bastante acentuada, por lo que no se puede mantener mucho tiempo la fruta en el árbol.
Algunas de las plagas que le suelen afectar son: Minador de los cítricos (Phyllocnistis citrella), Cochinilla, Araña roja y la Mosca blanca.
En teoría en los cítricos es posible la propagación sexual mediante semillas que son apomícticas (poliembriónicas). No obstante la reproducción a través de semillas presenta una serie de inconvenientes. Es preferible la propagación asexual y en concreto mediante injerto de escudete a yema, dando prendimientos muy buenos.
El Limonero
El limonero es un árbol frutal perennifolio, de pequeño tamaño (de 3-6 metros de altura, aunque existen muchos ejemplares longevos que superan esta altura), con numerosas ramas con espinas duras y gruesas, y de copa amplia y redondeada. De la familia de las Rutáceas. Su especie: Citrus limon.
Porte más abierto (menos redondeado que el naranjo). El extremo del brote se conoce como "sumidad" y es de color morado. Presenta espinas muy cortas y fuertes.
Sus hojas sin alas, desprenden olor a limón.
Las flores se presentan solitarias o en pequeños racimos, los azahares de un aroma especial. Floración más o menos continua, ya que es el cítrico más tropical junto al pomelo, por lo que se puede jugar con los riegos para mantener el fruto en el árbol hasta el verano, ya que es la época de mayor rentabilidad.
El fruto hesperidio, que produce el limonero es de forma oblonga u oval, de 7 a 12 cm de longitud, amarillo claro o dorado. Tiene una cáscara más o menos gruesa y punteada de glándulas, dependiendo de las variedades y en su interior, la pulpa está dividida en gajos, unidos unos contra otros dando forma al fruto, y poseen un jugo agrio y fragante. Sus semillas son pequeñas, ovoides y puntiagudas.
Sólo se consume en fresco en el terreno gastronómico, su uso está más aplicado como jugo en condimentos para sopas, bebidas, ensaladas, platos de pescado y cientos de postres de pastelería. El jugo es de gran valor dietético, aporta minerales, hídricos, vitaminas y glúcidos. Es utilizado también para fabricar bebidas refrescantes y además tiene propiedades diuréticas y facilita la digestión. La corteza se usa en perfumería, pastelería y en la confección de licores.
Es la especie de los cítricos más sensible al frío, ya que es la más tropical y presenta floración casi continua. Los períodos de sequía seguidos de precipitaciones juegan un importante papel en la floración. Presenta una producción bastante aceptable en suelos pobres, pedregosos y poco profundos, aunque es muy sensible a la salinidad. Es de mayor envergadura que el naranjo, por lo que los medidas de plantación son más amplios, aunque son variables dependiendo de la experiencia del agricultor. No se adapta bien a seto. Demandan mucho abono (macro y micronutrientes), lo mismo que el mandarino. Plan de abono orientativo en los primeros cuatro años. El limonero es una especies que demanda gran aporte de agua, los mismos condicionamientos que el mandarino.
La poda se realiza anualmente. Los chupones se conducen a rama lateral, para que abran un poco y pierdan esa altura (se les quita vigor). Se deben eliminar las ramas muertas, débiles o enfermas y vigorizar el resto de la vegetación. Los árboles que no se podan florecen abundantemente, pero posteriormente se hacen ingobernables.
Las plagas más comunes son: Minador de los cítricos (Phyllocnistis citrella), Araña roja, Cochinillas, Pulgones y la Mosca blanca. La propagación es posible la sexual mediante semillas, es preferible la propagación asexual.
El Naranjo
De la familia de las Rutáceas (Rutaceae). Su especie, Citrus sinensis. Su origen, al igual que los anteriores es China e Indochina. Su porte es reducido (6-10 m). Ramas poco vigorosas (casi tocan el suelo). Tronco corto.
Hojas: limbo grande, alas pequeñas y espinas no muy acusadas.
Flores: ligeramente aromáticas, solas o agrupadas con o sin hojas. Los brotes con hojas (campaneros) son los que mayor cuajado y mejores frutos dan.
Fruto: hesperidio. Consta de: Exocarpo (flavedo; presenta vesículas que contienen aceites esenciales). Mesocarpo (albedo; pomposo y de color blanco). Endocarpo (pulpa; presenta tricomas con jugo).
La variedad Navel presenta frutos supernumerarios (ombligo), que son pequeños frutos que aparecen dentro del fruto principal por una aberración genética.
Es una especie subtropical. No tolera las heladas, ya que sufren tanto las flores y frutos como la vegetación, que pueden desaparecer totalmente. Presenta escasa resistencia al frío (a los 3-5 ºC bajo cero sufre bastante). No requiere horas-frío para la floración. No presenta reposos invernal, sino una parada del crecimiento por las bajas temperaturas, que provocan la inducción de ramas que florecen en primavera.
Requiere de abundancia en agua. Necesita temperaturas cálidas durante el verano para la correcta maduración de los frutos.
Es una especie ávida de luz para los procesos de floración y fructificación, que tienen lugar preferentemente en la parte exterior de la copa y faldas del árbol.
Es muy sensible al viento, sufriendo pérdidas de frutos en precosecha.
En cuanto a suelos los prefiere arenosos o franco-arenosos, profundos, frescos y sin caliza, con pH comprendido entre 6 y 7. No tolera la salinidad, aunque la utilización de patrones supone una solución a este problema.
El proceso de inducción y desarrollo floral en el limonero está controlado por el estrés de temperatura e hídrico; aprovechándolo se realiza la siguiente práctica: se retira el riego durante 45 días y luego se riega en abundancia; así se produce una abundante floración que trae buena cosecha y buenos precios al año siguiente.
En cuanto a la poda, es una especie que tiene hábito de formación en bola y de producción en la periferia, por lo que se intenta lobular las formas para aumentar la superficie que intercepta luz y así aumentar la producción. Normalmente se forma en vaso. La poda de formación es muy controvertida, ya que la cosecha disminuye de forma proporcional a la intensidad de poda debido a que como especie pernnifolia acumula las reservas en ramas, brotes y hojas.
Algunos autores recomiendan podar todos los años, otros, cada 3-4 años limpiando el centro del árbol.
En cuanto a las plagas y riegos llevan los mismos condicionamientos que los árboles mencionados anteriormente.