De a poco se recupera, pero ya parece otro animal. Su pelaje blanco reluce, sus lesiones y especialmente una llaga en la pata delantera evolucionan, ganó un poco de peso y hasta tiene nombre: Olivia, por lo flaca. La vida de la perra callejera que apareció pintada con aerosol con el nombre del circo Rodas y que desató un revuelo, dio un giro de 180 grados. Es que fue rescatada por unas mujeres, atendida por un veterinario y ahora sus cuidadoras le buscan una casa, ya que no pueden quedársela. Y todo, sin que supieran que a la perra la buscó hasta la Secretaría de Ambiente, tras una denuncia por maltrato animal.
“A la perra la vio una amiga en el Parque de Mayo y la pasé a buscar. La llevé al veterinario, la curó y le dio antibióticos. La pintura no había tocado la piel, pero estaba desnutrida”, contó Geraldine Satter, quien no pertenece a ninguna protectora de animales. Otra amiga, Belén, cuidó a la perra unos días y cuando no tuvo fiebre, Geraldine la llevó a esterilizar. “A todo esto desconocíamos el revuelo que había con Olivia. Cuando vimos el diario y abrimos Facebook, nos enteramos de lo que estaba pasando”, añadió Geraldine.
Olivia es una perra cariñosa, temerosa y muy agradecida. De la pintura en aerosol ya no le quedan restos y como en el departamento de su rescatadora no hay lugar, Geraldine salió a buscar a alguien que la adopte. “Es una perra encantadora y se va a adaptar a una nueva casa”, dijo.
