La convocatoria no fue masiva como se esperaba, pero el reclamo por el esclarecimiento del caso del niño de 12 años que fue hallado muerto en una heladera se hizo oír en la peatonal del centro capitalino junto a los familiares de víctimas de otros crímenes impunes en la provincia.
No estuvieron la madre, su pareja o el hermano de Ariel Tapia, pero sí otros familiares. La concentración no superó las 60 personas, pero aseguraron que no será la última, dado que no hay detenidos a más de una semana de que hallaron asesinado al niño de Santa Lucía. La investigación ahora parece depender únicamente de las pericias que se realizan a los restos del niño y otras muestras en Salta.
