La selección Argentina de vóleibol no encontró en San Juan el lugar para reencontrarse con la victoria. Anoche, volvió a perder en esta edición de la Liga Mundial (cuarta caída seguida), y nuevamente ante Polonia en el Aldo Cantoni. En este caso fue 3-2 y más allá del punto que sumó, la noche se cerró con bastante amargura.
Para darle un poco de su medicina, Argentina comenzó el partido haciéndose fuerte en el bloqueo. Forzando el saque y así complicando la recepción, jamás permitió que en el set inicial los polacos se sintieran cómodos en esa faceta y se lo llevó por 25-22, apoyado también en algunos errores no forzados de la visita. Es más, en ese parcial Polonia no marcó puntos por bloqueo.
El siguiente parcial fue más parecido a lo del viernes. Con los dirigidos por Daniel Castellani manejando los ritmos del partido y, a través de mejorar en la recepción, saber las mejores opciones para el ataque. Fue 25-22 para los europeos que igualaron el match transitoriamente.
Argentina demostró en el tercer set que tuvo una actitud más luchadora que el del primer cruce entre ambos en este weekend. No se cayó en lo anímico y, gracias a la potencia en ataque de los sanjuaninos Pereyra y Quiroga, fue capaz de tomar ventaja desde el amanecer del parcial. Justamente un remate cruzado de Federico le dio la victoria momentánea al quedarse con el parcial por 25-20.
El penúltimo set fue parejo en todo su desarrollo. Argentina estuvo siempre corriendo abajo en el marcador, pero a escasos uno o dos puntos de diferencia. Aunque le faltó en el cierre la solidez justa en defensa y por eso lo dejó escapar 25-23.
La definición del encuentro a favor de Polonia se basó en sus pocos errores en el quinto y definitivo set que se adjudicó 15-12.