-¿Cuáles son los principales desafíos que deberá afrontar MASA para la estabilidad en la producción de Gualcamayo?
-Minas Argentinas basa su accionar en el concepto de “mejora continua”. Por lo tanto, nuestro objetivo es seguir sumando valor con el incremento de la producción del yacimiento, generando al mismo tiempo el menor costo posible de producción. Siempre resguardando la calidad de nuestro trabajo y las condiciones medioambientales de nuestro entorno. En la medida en que las reglas de juego existentes se mantengan en situación de estabilidad, los principales desafíos que prevemos son los de una producción cada día más eficiente en beneficio de nuestros accionistas y la comunidad en la que estamos insertos.
-¿Qué implica el funcionamiento de la mina en el contexto económico de la provincia?
-El funcionamiento de la mina implica beneficios directos a la provincia en el orden de los 83 millones de dólares, de los cuales casi 44 millones son aportes directos a las comunidades locales durante la vida de la mina. También ha contribuido en forma directa al desarrollo de infraestructura en esas comunidades.
Particularmente con la construcción de la línea eléctrica. A esto se suma la ampliación de al red de agua potable para Huaco. Y un número de contribuciones directas que se agregan al fondo fiduciario para desarrollo de infraestructura de las comunidades locales. Queda pendiente desde Huaco, la interconexión a Valle Fértil, ya que con esta obra se cubren 53 kilómetro de línea de alta tensión. Además de dejar previsto los campos de salida en la estación de Huaco hacia dicha localidad.
-¿Cómo evalúa el contexto político nacional para la actividad minera en general en este momento?
-Es evidente que existen sectores políticos que plantean cuestionamientos a algunos aspectos de la actividad minera, pero confiamos en que los hechos que estamos generando. Entre ellos, Gualcamayo, es un ejemplo concreto de minería confiable y sustentable. Permitiendo despejar dudas de la comunidad en general. De la misma forma en que se ha registrado con los miembros de nuestras comunidades aledañas. Facilitando la obtención y fortalecimiento de la licencia social para la minería en el país.
-¿Siente confianza en el largo plazo con respecto al marco político y jurídico en Argentina?
-El país para crecer sostenidamente necesita reglas claras y estables. Desde Sarmiento y Alberdi que se trata de hacer entender que la seguridad jurídica es el pilar fundamental del crecimiento. Países vecinos lo ponen en práctica y los resultados están a la vista. Pienso que Argentina es un país con excelente potencial y ese potencial debe transformarlo en riqueza.
-Pensando en el jachallero promedio como receptor, ¿cómo definiría a Gualcamayo?
-Lo definiría como una gran fuente de trabajo y desarrollo. Ya que Minas Argentinas es el principal empleador del norte de la provincia de San Juan. Da trabajo a un promedio de 550 empleados directos (el 85 % de los cuales son habitantes de Jáchal, Huaco, Santa Clara y Guandacol), lo cual implica volcar a la plaza local 60 millones de pesos en forma anual en concepto de salarios. Es importante destacar asimismo que más del 85 por ciento de nuestro personal habita en las localidades aledañas. El mismo ha sido capacitado por la empresa y recibe distintos beneficios en forma sostenida.
-¿Siente que la comunidad local asimiló la presencia de la mina en el departamento?
-Gualcamayo es de los jachalleros. Ellos la han construido y ellas la están operando. Consideramos que ésta es la más elocuente muestra de asimilación entre la comunidad y la empresa. Y responde a una política clara de Yamana Gold en todas sus operaciones mundiales: trabajar en estrecha colaboración con las comunidades que nos albergan. Mantener esta asimilación es nuestro desafío diario.
-En la compañía, ¿sienten el impacto de los movimientos antimineros y de manifestaciones en el campo político como las del diputado electo Pino Solanas?
-Estamos enfocados en producir y mejorar la calidad de vida de nuestros trabajadores y proveedores. Es lo que queremos lograr para obtener una licencia social sólida. Es parte de las pruebas positivas desde lo social y económico que ofrecemos a la sociedad y que ella misma saque sus conclusiones. Los invitamos a participar en monitoreos y controles. Esas son las opiniones que tienen fundamento real.
-¿Qué le parece que en ámbitos legislativos se instaure la discusión acerca de cambiar porcentajes de regalías mineras?
-La minería es un negocio que implica grandes riesgos y plazos extensos en el tiempo. Tener reglas claras y estables nos animará a crecer y seguir explorando, que es la verdadera fuente de sustento y desarrollo de la minería. Sin nuevos descubrimientos se cortaría una cadena productiva minera.
-¿Qué opina acerca de que se discuta modificar el sistema de retenciones a la industria minera?
-Insisto en que una mayor presión tributaria podría volver inviables proyectos que hoy son una potencial fuente de inversión genuina. En el caso de Gualcamayo está contemplado el pago de 5 por ciento de retenciones a las exportaciones y ese fue el marco legal al momento de presentar los estudios de factibilidad técnico-económica.
