Buenos Aires, 24 de febrero.- Luego de su escandalosa separación del "Negro" Luengo, Mónica Farro comenzó a salir con Alejandro Larose, un empresario gastronómico cordobés. La relación fue creciendo con el paso del tiempo y a finales del año pasado se comprometieron.
Pero, en la historia apareció Paola Cevey, una joven que contó en los medios que había tenido un affaire con Larose en Carlos Paz, mientras Mónica estaba trabajando en Entre Ríos en la comedia "La noche de las pistolas frías".
Farro decidió cortar con Alejandro cuando vio por televisión los mensajes de texto y las fotos que probaban el engaño. Una vez más, la vedette sufrió un desengaño amoroso que se vio como una telenovela en la pantalla chica.
"Estoy tomándome un respiro pero muy tranquila. Hoy estamos en un impasse en la relación. Sigo creyendo en el amor, pero creo que a la vida hay que disfrutarla sin conflictos y todo lo que sea negativo hay que correrlo a un costado", afirmó Mónica al diario Crónica sobre cómo quedó su vínculo con Larose, tras enterarse del engaño.
"La gente se puede equivocar y aprender de sus errores. Ahora voy a ver si tengo ganas de tener a alguien que se equivoque a mi lado. El tiempo dirá. Hoy por primera vez pienso en mí. Estoy muy tranquila porque sé que hice las cosas bien. Si quienes tengo a mi lado se marean, no es mi problema", agregó.
Más allá de este escándalo, Mónica disfruta el éxito que están teniendo en Entre Ríos con la comedia: "El dolor que uno experimenta con esas cosas es muy grande. Pero es cierto que estoy disfrutando mucho de la temporada. Nos va muy bien. Debo reconocer que cuando me ofrecieron hacer Entre Ríos, me pareció que era como irse al muere abrir una plaza nueva que no sabía si iba a funcionar. Pero Daniel Comba no se equivocó. El dijo que íbamos a ser pioneros. Me la jugué y es un verdadero éxito".
