El seleccionado argentino de básquetbol perdió ayer con España por 105 a 85, en partido amistoso jugado en la ciudad de La Coruña, en la previa a los Juegos Olímpicos. El equipo dirigido por Julio Lamas asumirá su próximo examen el domingo, frente a Estados Unidos.
El detalle más significativo del quinteto argentino fue el hecho que el escolta Carlos Delfino cumplió sus primeros minutos en cancha, tras reponerse de una lesión inguinal, que obligó a una intervención quirúrgica en abril pasado.
Argentina fue superada durante un largo pasaje del espectáculo por un rival que mostró una jerarquía descomunal, sobre todo en los primeros 20′ de partido. Es que el quinteto español mostró una eficacia sorprendente en los tiros de campo, especialmente, en los lanzamientos triples, al anotar 9 de los 15 que ensayó.
En el primer segmento Argentina no sólo no lograba contener el perímetro rival sino que tampoco acertaba en los tiros de cancha y por eso el 33-13 no sorprendió. En el segundo cuarto, el desarrollo no se modificó demasiado. Luis Scola y Emanuel Ginóbili lucían faltos de ritmo. Encima la defensa zonal no ofrecía garantías y España con un nivel lindante con la perfección y terminó 61-36 en la primera mitad.
En el segundo tiempo, Argentina experimentó un repunte, a partir de un mejor funcionamiento del tándem Scola-Ginóbili y el partido, inesperadamente, empezó a tornarse brusco. El quinteto argentino aprovechó, reaccionó y descontó la diferencia (83-67).
En el arranque del último se mostró entusiasmada por recomponer la imagen. Y como España no convirtió en 3′, el parcial de 9-0 sirvió para achicar hasta 76-83. Pero España retomó las riendas y culminó ganando por 20 tantos de diferencia (105-85), una distancia que existió entre uno y otro equipo durante buena parte del cotejo.
