Pero esta fiesta tuvo un condimento especial ya que por primera vez participaron alumnos de todas las localidades del departamento, copando las calles de guardapolvos blancos. Hubo unas 3.000 personas entre el público, según los organizadores.
Los alumnos del Nivel Inicial tuvieron la responsabilidad de abrir el desfile. Y lo hicieron con un toque de color y creatividad. Cada salita desfiló portando banderas gigantes realizadas por los chicos. Algunos recurrieron al papel crepé, otros a telas y otros a la lana, como los niños de la escuela Luis Agote, que portaron un estandarte de unos 20 metros de largo, tejido en blanco y diferentes gamas de celeste.
Posteriormente desfilaron los alumnos que llegaron desde La Majadita y Rincón Cercado, entre otras localidades alejadas y disfrutaron el aplauso entusiasmado de la gente que copó las calles en familia para participar de la fiesta. Pero no sólo los alumnos de las escuelas departamentales desfilaron en 9 de Julio. También lo hicieron los chicos que asisten a las escuelas deportivas y academias de danza.
Ninguno de los alumnos se retiró del lugar pese a había concluido el desfile. Se quedaron para participar de las actividades que se llevaron a cabo en la plaza y que incluyó la actuación de Los Manseros y de La Fiesta.
