Joaquín Furriel y Rodrigo De la Serna impactaron anoche en el Teatro Sarmiento. Los actores trajeron su "Lluvia constante" y dieron sobrada muestra de que saben hacer buen teatro. Con un texto complejo, una historia llena de personajes que los protagonistas recrearon con soltura y rodeados de tachos de aceite, un carro y cubiertas de auto (que se fueron transformando en lo que la escena pidiera), la trama transitó diferentes climas. Arrancaron carcajadas o lograron ese silencio que conmueve y tanto agradecen los actores, a un público que casi colmó la sala en una nueva invitación de Fundación Protea.

Hay buena química entre los jóvenes actores, dos figuras destacadas de su generación. Furriel quizás más conocido como galán de telenovelas, pero con experiencia teatral. De la Serna, brilla por su calidad interpretativa y sigue demostrando por qué llegó a donde está.