Los detalles organizativos más cercanos a los conjuntos europeos son solucionados por él. Roberto Amadio, veneciano, ex campeón mundial de ciclismo en pista en 1986, es el encargado de invitar a los equipos. En la imagen junto a Vincenzo Nibali, antes de salir a la práctica de ayer.

 

Es amigo de Gabriel Curuchet desde años, cuando el presidente de la UCRA (Unión Ciclista de la República Argentina) junto a su hermano menor, Juan, iban todos los inviernos argentinos, veranos europeos, a participar de competencias en Italia. Aportó a Italia la medalla de oro de la persecución por equipos en los mundiales de pista de 1985 realizados en Bassano Di Grappa, resultado que fue revancha de haber quedado en la puerta del bronce en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984. Roberto Amadio, nacido el 10 de julio de 1963 en Portogruaro, localidad cercana a Venecia, es el hombre clave para que desde el sábado haya en San Juan siete equipos de categoría WTT (World Tour Team). Consultado sobre qué ocurrió para que la Vuelta a San Juan casi duplicara sus conjuntos de la “Fórmula 1” del ciclismo, este hombre que fue profesional entre 1985 y 1989 y luego entre 2005 y 2014 fue Team mánager y luego director del equipo italiano Liquigas-Cannondale; confesó: “Que hayan ganado etapas y la carrera corredores importantes del pelotón profesional, como Mollema, Gaviria, Richeze, Boonen, Navardauskas y Rui Costa, le dio a la carrera un prestigio importante”.

Tras aclarar que siempre es complicado el primer año, porque en Europa se desconoce cuales son las cualidades de la carrera, Amadio, contó: “Nos ocurrió también en San Luis, al principio los equipos son reacios. No es tan sencillo, deben viajar muy lejos de sus lugares de origen y cuesta convencerlos. Después, como le anticiparon ayer Roberto (Coca) y Gabriel (Curuchet) la comunicación de los ciclistas y jefes de equipos de boca en boca, ayuda para que se interesen en venir”.

Se mostró gratamente impresionado por la manera en que la Secretaría de Deportes ha encarado la organización de la segunda edición UCI (Unión Ciclista Internacional de la carrera). “Creo que se tomó nota de lo hecho el año pasado y con mucha seriedad se han organizado distintas áreas de trabajo para no dejar nada librado al azar. Hasta en las mejores carreras hay imprevistos, acuérdese que en el último Tour de Francia se cayó un arco inflable”, explicó.

Junto a Ángela Roldán y Juan Ignacio Campoy, dos integrantes de la Secretaría de Deportes que están toda la jornada en el lugar de concentración para evacuar las dudas y ayudar en lo posible a todos los visitantes.

Contó, también, que no sólo en la ruta habrá un nivel competitivo mayor al del año pasado por contar con siete equipos WTT, sino que también acudirán renombrados periodistas de medios importantes de Italia (Gazzetta dello Sport), de España (Marca) y de Bélgica. “Argentina, San Juan, estará en los principales medios de papel que cubren el ciclismo europeo y mundial”, amplió.

Consultado sobre cual es la etapa de la próxima Vuelta que le gustaría correr, no dudó un instante, “la Interlagos”, sentenció. Luego explicó que “aparte del paisaje” será un parcial muy técnico y en el que cree se marcarán las primeras diferencias. “Es muy dura, habrá que subir cuatro veces al paredón de Punta Negra, allí se irá seleccionando el pelotón. Aunque no creo que se saquen distancias determinantes, me parece que ya habrá una general más estirada”. Posteriormente, afirmó que entiende que la carrera se definirá entre la contrarreloj y el Colorado. “Creo que son las dos etapas más decisivas, me parece que allí aparecerán los candidatos a quedarse con la clasificación general”.

Amadio, de hablar pausado y amable, esta convencido que si la Vuelta se desarrolla sin inconvenientes, el año próximo dará otro saltito de calidad. “Espero que no haya accidentes, que todo se desarrolle bien y estoy seguro que en 2019 podremos tener algún equipo más”. Después de San Juan viajará a Colombia, donde sin la incidencia que tiene en San Juan, colaboró con algunos equipos.

Para Amadio, la Vuelta crecerá este año a pasos agigantados.

 

Hoy se sumará Maximiliano Richeze

Tras completar una decena de días entrenando en San Luis, hoy se sumará al equipo belga Quick-Steep Floors, el ciclista argentino Maximiliano Richeze. Quien es el principal lanzador del velocista colombiano Fernando Gaviria realizó trabajos específicos junto al sanjuanino Nicolás Tivani, que participará por segundo año consecutivo vistiendo la casaca de la escuadra de origen italiano, pero de bandera búlgara, Treviggiani-Phonix.

Ayer, sus compañeros, como los integrantes de los otros cinco equipos World Tour Team que arribaron el lunes, salieron a rodar por la ruta Interlagos. Aparte de estirar las piernas, luego de un viaje de más de 16 horas, pudieron ir conociendo el recorrido de una de las etapas más interesantes que tendrá la carrera.

De acuerdo a lo informado por la organización, el viernes arribará a San Juan el último equipo WTT, el Movistar español, como así también lo harán las escuadras Pro continentales y selecciones nacionales de países que disputarán la competencia.

 

Máquinas

 

El laboratorio. Los mecánicos acondicionaron ayer las bicicletas que viajaron desarmadas. El equipo Bora y los otros alojados en el Del Bono Park, tienen montados auténticos “laboratorios”.
Frenos a disco. Todas las bicicletas del Quick-Steep, tienen este sistema de frenado.
Personalizadas. Tanto las máquinas como los cascos tienen destacado el nombre de su dueño.
Prototipo. Esta versión especial de la Specialized (Quick-Steep) no tiene valor comercial. “Parece una gillette”, comentó Gabriel Curuchet, destacando la aerodinamia que posee.