El joven tenista argentino, Sebastián Báez, cerró el año siendo uno de los más ganadores dentro del mundo de la ATP (Asociación de Tenistas Profesionales). El jugador porteño, que logró tres victorias, sólo fue superado por los cuatro mejores jugadores del mundo, el serbio Novak Djokovic, el español Carlos Alcaraz, el ruso Daniil Medvedev y el italiano Jannick Sinner, quienes lograron más de cuatro victorias en el año.

Es verdad que no tienen punto de comparación la importancia de los torneos ganados entre los "cuatro fantásticos" y el muchacho porteño; pero el hacer referencia al número de títulos comienza a ubicarse en lo que dentro del ambiente se denomina el círculo privilegiado.

Báez se consagró campeón en el Córdoba Open (categoría 250), en el 250 de Kitzbühel (Austria), y en el 250 de Winstom Salem (Estados Unidos).

Su triunfo más importante fue en la final austriaca, donde venció a Dominic Thiem, local y poseedor de un Gran Slam.

Djokovic, con siete torneos fue el más ganador del año. Alcaraz, logró seis; Medvedev, cinco; Sinner, cuatro; y luego viene, solitario, el argentino de 22 años, Sebastián Báez.