Unidos. El seleccionado Sub-19, en el hotel. El grupo está unido y sólo piensa en trabajar para llegar afilados al debut. (Fotos: Marcos Carrizo)

Ya pasó el día desordenado de la llegada. Ese en el que todos mezclaron cansancio, ansias y admiración por el lugar. Ayer todo volvió a la normalidad y el trabajo de entrenamiento dominó los tiempos de ambos seleccionados. Los chicos del Sub-19 y Las Águilas volvieron a las prácticas en doble turno acá, en la bella y tranquila Tarragona. Lejos, a unos setenta kilómetros, de la ruidosa Barcelona, la capital de los catalanes.

El segundo día de estadía en el Hotel Nuba de la localidad de Coma-ruga, que es una playa hermosa pero tranquila al cien por ciento en esta época del año, tuvo de todo tipo de actividades.

Largó bien temprano, apenas pasadas las ocho de la mañana, con el entrenamiento en el gimnasio del propio hotel. Por ahí pasaron primero los chicos del Sub-19 y después Las Águilas, que desde que llegaron acá tienen el plantel completo dado que en Madrid se sumaron Daiana Silva y Adriana Gutiérrez.

Un par de horas de descanso, algunos en las habitaciones del hotel y otros caminando en los alrededores. Estos últimos aprovechando la desolación del lugar. Algo completamente al día anterior, cuando todos esperaban con ansias la noche de San Juan para festejar y usar su pirotecnia.

Inclusive ayer sopló una brisa desde la misma mañana. Algo que se fue intensificando con el correr de las horas para convertirse en temperatura bien fresca por la noche.

Luego del almuerzo (hay conformismo generalizado por las comidas y por la atención en el lugar) otro rato de descanso, ahí sí ya en las piezas de cada uno. Y tras la merienda, viaje en autos alquilados hasta el club Cerdanyola Valles FC (a unos 40 kilómetros de distancia) para ponerse los patines por primera vez en tierras españolas.

Cada entrenamiento duró una hora. Primero los chicos y después las chicas. Ante la mirada atenta de los entrenadores que a esta altura ya empiezan a delinear los equipos que debutarán en sus respectivas categorías dentro de unos días.

Debido a que el comedor del hotel ya estaba cerrado cuando los planteles regresaron desde Cerdanyola, los encargados de los equipos con el profe Carlos Mercado a la cabeza acordaron que se les guardase unas viandas para todos quienes viajaron al entrenamiento.

Hoy será otro día duro. De nuevo con gimnasio por la mañana y prácticas en cancha por la tarde (esta vez en lugar a confirmar). El debut se acerca. Los nervios van en aumento pero el optimismo también se agranda.

Garcés y el debut ante España: "Es lo mejor"

A Juan Manuel Garcés muchos lo tienen por un técnico duro y exigente. Pero él es un tipo abierto, que pregona conducta pero es flexible para entender todo de este plantel Sub-19 nacional. Desde que están acá, en Tarragona, a los pibes se los nota ansiosos. Contando las horas para debutar. El técnico "Juanma" lo reconoce: "Sí, es cierto, están muy ansiosos, pero estos chicos son maravillosos. Le meten para adelante, trabajando y trabajando. Son obedientes y saben que para intentar lograr el objetivo tendrán que hacer todas las cosas bien y en forma ordenada".

"Todos están pensando en el debut con España. Justo el local. Justo un rival demasiado exigente. Pero yo les dije que lo mejor que nos podría haber pasado es debutar contra España. Todos sabemos, los que hemos estado y estamos en el deporte, que en el primer partido puede pasar cualquier cosa. Que las cargas están equilibradas para los dos lados. Así que hay que estar bien. Pensar en positivo. Creer en que daremos el batacazo. Al fin y al cabo, para salir campeones tenés que ganarle a todos", dijo.

Más adelante el técnico, que debuta en dirigir Selecciones Nacionales, señaló: "No soy un técnico duro y exigente. Yo no voy a castigar a nadie si llega cinco minutos después a un entrenamiento. Dará sus razones y habrá que escucharlo. Sí me molesta que no sean obedientes y compañeros entre sí. Porque así es como se logran los objetivos".

En la cuenta regresiva para los World Roller Games

Con once modalidades de patinaje diferentes y un variado surtido de pruebas, los World Roller Games entraron en la cuenta regresiva pues comenzarán el 4 de julio y culminarán el 14 del mismo mes, en Barcelona. Mientras que el día 4 será la ceremonia inaugural luego se irán sucediendo las competencias. Así, las primeras finales serán el día 7 y corresponderán al skateboarding street y el roller freestyle.

El 11 serán las finales de programa corto de patinaje artístico, la definición del patinaje de velocidad 100m Sprint será el 13 de julio y un día después, la del Maratón de patinaje de velocidad. Las definiciones del hockey sobre patines serán el 14 de julio, de 12 a 14 y de 18 a 20 (hora de España), lo que le dará paso a la ceremonia de clausura.

En total, en Barcelona y durante lo que dure la competencia global habrá 4.120 atletas representando a 81 países.

Diario de viaje

Allá, en nuestra patria, se festeja de otra manera. Todos conocen las tradicionales fogatas de San Juan Baustista. Esas gigantes montañas de leña que arden mientras todos gritan y miran a su alrededor. Claro que el tiempo ha ido apagando la tradición. Todavía hay quienes las encienden. Pero hace 30 años, todos se desvelaban por hacerlo. Acá, en toda España, también se festeja pero de una manera diferente. En forma especial en las ciudades de la costa. Y más aún, en los poblados más antiguos y menos "famosos" como esta Tarragona llena de historia. Y la tradición sigue intacta. Tan viva como hace 30 años. Ahí está la diferencia.

Cuando entra la noche, la gente empieza a agolparse en la avenida al lado de la playa. Todo es festividad. Entonces se cumplen las doce de la noche y llega lo mejor. Ahí sí de verdad empiezan a sonar las bombas, los petardos. Toda la artillería de la pirotecnia que nadie de los nuestros se pueda imaginar. El humo invade el ambiente. Y aparecen los fuegos artificiales en todo su esplendor. Un espectáculo único. Para eso estuvieron esperando más de dos horas. Tres bombas ensordecedoras se habían encargado de anunciar el inicio del festival de los artificios y otras tres marcan el final. Fueron más de quince minutos en que nadie bajaba la cabeza. Y claro, después llegan las comilonas y los bailes. Porque todos bailan. Cualquier ritmo. No importa. Lo que vale es divertirse. Total, al día siguiente es feriado. El San Joan de los catalanes es algo impresionante. Lo viven con pasión.