El sábado pasado fue nerviosismo puro. Adrenalina al máximo. Incertidumbre total. Hasta que se dio ese golazo de Messi que abrió el camino a una gran ilusión. Al final concretada con el triunfo ante el complicado México. Hoy, que no le quepa dudas a nadie, será lo mismo. Otra vez los corazones latirán con pulsaciones altas. Otra vez muchos se comerán las uñas. De nuevo habrá que cruzar los dedos en cada ataque rival o gritar "Alicia, quiricocho" como lo hacen los chicos de ahora. O, esperemos, gritar a grito pelado los goles albicelestes.

La Selección Argentina está otra vez en una situación límite. Para clasificar a los octavos de final del Mundial de fútbol Qatar 2022 tiene que ganarle a Polonia. Juegan esta tarde desde las 16 (hora argentina), coincidiendo con el otro partido del Grupo C (Arabia Saudita-México) que también tiene importancia sobre las posiciones finales. El empate lo deja complicado al equipo de Scaloni porque ya no depende de si mismo sino tiene que esperar el resultado de ese otro partido del Grupo. Y la derrota lo elimina de toda posibilidad de clasificar. Así de cortito. Así de determinante.

En Mundiales, Argentina-Polonia jugaron dos veces. En 1974, Polonia ganó 3-2. En el '78, Argentina lo hizo 2-0

A esta altura ya no hay secretos. Es para el técnico Scaloni buscar las piezas justas para no regalar nada ante un equipo de neta estirpe europea. Porque Polonia, se sabe, basa su funcionamiento en el poder físico de sus jugadores y le tira la responsabilidad ofensiva a su carta principal: el goleador de raza Robert Lewandowski. Claro que también tiene otros atributos, como la velocidad de sus extremos, que en realidad son sus marcadores de punta con proyección. Dada la peligrosidad de la Argentina, seguramente su técnico tomará sus recaudos y por ahí todo el equipo va más atrasado de lo normal. La gran duda es saber si saldrán a presionar alto desde un principio o le cederán terreno al equipo argentino para después contragolpearlo.

Esta claro que Messi y sus compañeros se sienten mucho más sueltos cuando los esperan en el fondo. Porque cuando los presionan, inclusive en la salida, les surgen algunas dudas, sobre todo en la posición que deben ocupar sus volantes.

Según anticipó ayer el técnico Scaloni el equipo mantendrá la línea de juego y hará pocas variantes en cuanto a nombres. Pero parece que con las horas se va arrepintiendo. Montiel, por ejemplo, es un hecho que no salga de titular (iría Molina o Foyth). Tampoco Lisandro Martínez (entraría "Cuti" Romero). En el medio el que saldría del equipo inicial es Rodríguez (Paredes o Enzo Fernández serían su reemplazo) y en ofensiva los mismos de siempre: Messi, Lautaro Martínez y Di María. ¿Será hoy el día de los de arriba? Especialmente de Lautaro, que en los partidos anteriores "caminó" la cancha más que hacer lo que sabe. El DT confía en eso porque tiene a Julián Álvarez esperando en la "gatera". Se puede hablar mucho antes. Pero la verdad estará sólo en la cancha. ¡Vamos Argentina!