El primer ministro de Japón, Shinzo Abe, aseguró ayer que su país hará "todos los esfuerzos que sean necesarios para garantizar que los Juegos Olímpicos se desarrollen con absoluta seguridad", en referencia a la amenaza del coronavirus.

El inicio de los Juegos Olímpicos Tokio 2020 está previsto para el 24 de julio y Abe habló durante una conferencia de prensa convocada para explicar cuáles serán las medidas que Tokio llevará adelante para afrontar la situación de emergencia.

Hace algunos días, el premier aconsejaba la cancelación por un período de 15 días de las actividades deportivas y culturales para evitar congregaciones masivas que facilitarían la propagación de la enfermedad.

Lo mismo recomendaba para que las autoridades educativas decretaran la suspensión provisoria de las clases en las escuelas primarias y secundarias de todo el país con idéntico objetivo.

Según los informes, hasta ayer el coronavirus provocó 11 muertos en Japón, que registra 946 casos, 705 de los cuales corresponden al crucero Diamond Princess, atracado en Yokohama.

La situación llevó a poner en duda la realización de los Juegos Olímpicos en tiempo y forma y a especular con una suspensión o hasta con la posibilidad de cancelarlos directamente.

En la víspera, el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), el alemán Thomas Bach, descartó esa hipótesis y dijo que la entidad está "absolutamente decidida a seguir adelante" con la organización.